Reino monera

Te explicamos qué es el reino monera, el origen del término, sus características y clasificación. Cómo es su taxonomía y ejemplos.

¿Qué es el reino monera?

El reino monera es uno de los cinco reinos biológicos, que se utilizan en biología para clasificar a los seres vivos, además del reino animal, reino vegetal, reino protista y reino fungi.

Este reino comprende las formas de vida más simples y primitivas que se conocen. Pueden ser muy diversas en su naturaleza, aunque presentan características celulares comunes: son unicelulares y procariotas (las células no tienen núcleo ni orgánulos internos). Además, se reproducen asexualmente y el tipo de nutrición puede ser autótrofa o heterótrofa, dependiendo de la especie.

Hoy el término monera está en desuso. Se prefieren otros modelos de clasificación, como el propuesto por Carl Woese en los años 1970, que distingue tres dominios: Eukarya (que incluye a todos los organismos eucariotas, dentro de los reinos animal, vegetal, fungi y protista), Archaea (arqueobacterias) y Bacteria (bacterias). Los organimos del reino monera quedan diferenciados en estos últimos dos dominios.

Los organismos que se agrupaban en el reino monera son muy primitivos. Se cree que fueron las primeras formas de vida en habitar la Tierra.

Una de las ideas más aceptadas es la llamada Teoría de la endosimbiosis seriada, desarrollada por la bióloga estadounidense Lynn Margulis en 1967. Esta teoría propone que un par de organismos unicelulares pertenecientes al reino monera habrían desarrollado una simbiosis muy estrecha, que llevó a uno a formar parte del cuerpo del otro y ocuparse de algunas funciones internas.

• Ver además: Reinos biológicos

Características del reino monera

Las principales características que comparten los integrantes del reino monera son:

• Tienen un tamaño muy pequeño. Son los seres vivos más pequeños que existen en el planeta. Miden de 3 a 5 micrómetros (milésimas de milímetro).
• Son unicelulares. Son organismos formados por una sola célula, que funciona de manera autónoma. No forman tejidos, ni órganos más complejos.
• Son procariotas. Son células muy sencillas: carecen de núcleo celular y no tienen organelas de ningún tipo. La información genética se encuentra en una molécula de ADN circular que está suelto en el citoplasma.
• Se reproducen asexualmente. Son organismos que se reproducen mediante fisión binaria, un mecanismo de reproducción que no implica la producción de células sexuales. En este proceso, un individuo da origen a dos que son idénticos.
• Pueden tener nutrición heterótrofa o autótrofa. Muchas especies dentro de este reino son organismos heterótrofos (se alimentan de materia orgánica del medio ambiente). Otras especies son autótrofas (fabrican su propio alimento). Obtienen materia orgánica aprovechando la luz solar y otras sustancias (fotosíntesis) o a través de reacciones químicas del entorno (quimiosíntesis).

Los organismos que se agrupaban tradicionalmente en el reino monera incluían a todos los organismos procariotas, es decir, a las bacterias y a las arqueas. Con el tiempo se descubrieron grandes diferencias entre estos dos grupos, que hicieron que fueran consideradas formas de vida distintas.

Historia del reino monera

El término “monera” tiene sus raíces en el vocablo griego moneres (que significa “simple”) y se ha usado a lo largo del tiempo, con distintos significados. En principio fue propuesto por el naturalista y filósofo alemán Ernst Haeckel en 1866, quien planteó una clasificación de la vida basada en el evolucionismo.

Haeckel distinguió tres reinos: animal, vegetal y protista, y reunió en el último a todas las formas de vida “simples” o “primitivas”, que no parecían tener un parentesco específico con los animales y las plantas, considerados “superiores”. Haeckel colocó a las microscópicas moneras en la base del árbol evolutivo y las clasificó dentro del reino protista.

Posteriormente, en los años 1920, el naturalista francés Édouard Pierre Chatton descubrió que las bacterias no tienen núcleo celular y, en función de este hallazgo, propuso la distinción y el uso de los términos procariontes para organismos sin núcleo celular y eucariontes para organismos con núcleo celular respectivamente.

 A raíz de ello, en 1939, Fred Alexander Barkley empleó el término monera para referirse a un nuevo reino formado por el conjunto de todos los organismos procariotas, y que se dividía entre arqueófitos o Archeophyta (actuales cianobacterias) y esquizófitos o Schizophyta (bacterias).

En 1956, el biólogo estadounidense Herbert Copeland reorganizó los reinos de la vida en cuatro categorías: animales, plantas, protoctistas (donde estaban los eucariontes unicelulares y los de organización simple) y moneras (donde estaban los procariotas). En 1969 el ecólogo estadounidense Robert Whittaker añadió a esta clasificación el reino de los hongos (Fungi).

Si bien esta clasificación sigue siendo popularmente utilizada, el término monera ha desaparecido de la literatura técnica, luego de los cambios propuestos por el microbiólogo estadounidense Carl Woese, conocido como el creador de la nueva taxonomía molecular. En los años 1970, este científico descubrió que los procariontes encajaban en dos grupos distintos en función de su estructura, composición y genética molecular.

Woese propuso la reorganización de este grupo de organismos en dos taxones distintos, Archaea (o arqueas) y Bacteria (también llamadas Eubacterias), con la categoría nueva de dominio. El otro dominio, Eukarya, lo forman todos los organismos eucariontes, divididos en los cuatro reinos que ya se habían descrito: Protista, Animalia, Fungi y Plantae.

Clasificación del reino monera

Los principales grupos dentro del reino monera son:

1. Eubacterias

El nombre eubacteriss significa “bacterias verdaderas” y representan las formas de vida celular más simples conocidas sobre la Tierra. Este grupo de organismos procariotas posee un único cromosoma y una pared celular rígida compuesta de peptidoglicano (una combinación de azúcares y aminoácidos que otorga gran resistencia).

Algunas bacterias son móviles y cuentan con flagelos que utilizan para desplazarse. Pueden presentar diversas formas y en función de este criterio pueden clasificarse en bacilos (con forma de bastón), cocos (con forma redonda), espirilos (con forma de tirabuzón) y vibrios (con forma de coma).

2. Arqueobacterias

Las arqueobacterias comparten algunas características con las bacterias (como la falta de núcleo dentro de la célula), pero sus diferencias, como la composición de su pared celular, las ubican en una categoría aparte.

Se caracterizan por vivir en condiciones que imposibilitan la vida de otros seres vivos. Se las encuentra en hábitats extremos, donde sobreviven aprovechando los recursos químicos del medio (como la salinidad, el calor, el pH). Se cree que son tan numerosas que componen el 20 % de la biomasa terrestre.

3. Cianobacterias

Conocidas como algas verde-azuladas, las cianobacterias son los únicos organismos procariotas capaces de realizar la fotosíntesis oxigénica, al igual que las plantas (aunque de una manera ligeramente distinta).

Son los seres procariotas de mayor tamaño: pueden alcanzar dimensiones de hasta 60 micrómetros. Su presencia en la mayoría de los hábitats les permite formar relaciones simbióticas con otras especies.

• Ver además: Bacterias

Diferencias entre bacterias y arqueas

La diferencia entre las bacterias y las arqueas es que tienen orígenes evolutivos diferentes. A pesar de las similitudes morfológicas, los estudios moleculares revelaron que las arqueas, en realidad, son mucho más antiguas y no están emparentadas evolutivamente con las bacterias. Por este motivo, existen propuestas científicas para considerar que bacterias y arqueas no pertenecen al mismo reino.

Taxonomía del reino monera

Este reino se subdividía inicialmente en dos: bacterias y arqueas, cada una con su propia subclasificación. Pero tras el descubrimiento del ADN ribosómico en los años 1980, se pudo establecer una nueva clasificación basada en cuatro grupos distintos:

• Mendosicutes, arqueas o arqueobacterias. Arqueas significa “antiguas”, ya que inicialmente se suponían una especie de protobacterias. Es difícil clasificarlas ya que son realmente muy pequeñas, pero presentan rutas metabólicas y procesos internos mucho más semejantes a los eucariotas que a los demás procariotas tradicionales.
• Mollicutes, Tenericutes o micoplasmas. Son un tipo de bacterias mayormente parásitas, cuyo rasgo notorio es que carecen de la pared celular presente en la mayoría de las bacterias y que tienen una forma y un código genético de los más simples conocidos.
• Gracilicutes o bacterias gram negativas. Son un supergrupo de bacterias que integran los grupos Spirochaetes, Proteobacteria, Planctobacteria y Sphingobacteria. Se caracterizan por tener una pared celular muy delgada (que a veces incluso está ausente) compuesta de mureína y una doble membrana plasmática. Las características de su pared celular hacen que no sean susceptibles a la tinción de Gram, y de ahí su nombre.
• Firmicutes o bacterias gram positivas. Llamadas endobacterias, poseen una pared celular muy gruesa y forma de bacilo o de coco. En este grupo se hallan las bacterias gram positivas, que responden a la tintura de Gram adquiriendo color azul o violeta.

Ejemplos del reino monera

Algunos ejemplos de organismos del reino monera son:

• Escherichia coli. Es un bacilo gramnegativo que a menudo vive en el tracto digestivo humano.
• Clostridium tetani. Es una bacteria muy común en el suelo y en el tracto digestivo de algunos animales, que puede causar una enfermedad conocida como tétanos.
• Helicobacter pylori. Es una bacteria que puede infectar células del estómago de algunos mamíferos y causar úlceras.
• Bacillus antracis. Es una bacteria que vive en el tubo digestivo de algunos herbívoros y forma esporas. Puede afectar la salud humana.
• Mycobacterium tuberculosis. Es el agente causal de la tuberculosis en humanos. Es un patógeno intracelular, ya que puede vivir dentro de las células eucariotas. Su cultivo es muy dificultoso y lento.
• Treponema pallidum. Es una bacteria alargada con forma de espiral o resorte. Es el responsable de la sífilis, una enfermedad que existe solamente en los seres humanos.
• Anabaena variabilis. Es una cianobacteria. Tiene la capacidad de hacer fotosíntesis y formar simbiosis con plantas y hongos.
• Methanococcus jannaschii. Es una arquea. Vive en ambientes con temperaturas extremas (es termófila) y elimina metano como residuo de su metabolismo.
• Halobacterium salinarum. Es una arquea. Vive en ambientes con altas concentraciones de sal (es halófita).
• Thermoproteus tenax. Es una arquea. Vive en ambientes con temperaturas extremas (es termófila). Utiliza azufre en su metabolismo. 

Importancia del reino monera

Los integrantes del reino monera fueron los primeros organismos que existieron cuando la vida se originó en el planeta. Su simpleza les permitió surgir y sobrevivir en las hostiles condiciones iniciales de la Tierra y aún hoy es posible hallar representantes de este grupo en hábitats donde otras formas de vida no pueden adaptarse ni subsistir.

Desde este enfoque, estudiar estos organismos es intentar profundizar en el conocimiento sobre el origen de la vida.

Dentro de este grupo, muchos son agentes infecciosos del ser humano, cuyo estudio permite combatir mejor enfermedades y salvar vidas. Por otra parte, muchos microorganismos clasificados en este reino son utilizados por los seres humanos en distintas industrias, como la farmacéutica o la alimenticia).

El reino monera es fundamental para el ambiente, sobre todo, por su rol en las redes tróficas. Muchas bacterias son descomponedoras y, por lo tanto, permiten que se complete el ciclo del carbono, y se devuelva este elemento a su forma inorgánica. Las bacterias fijadoras de nitrógeno, por ejemplo, que tienen gran importancia para las plantas.

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Referencias

• Curtis H., Barnes N., Massarini A., Schnerck A., BIOLOGÍA. Edición 7º. Editorial Médica Panamericana (2008).
• Whittaker RH, Margulis L. Protist classification and the kingdoms of organisms. Biosystems (1978).