Te explicamos qué es un hábitat, qué tipos existen y ejemplos. Además, qué es un nicho ecológico.

¿Qué es un hábitat?
Un hábitat es un lugar que tiene las condiciones adecuadas para que viva una especie o un conjunto de especies (comunidad), ya sean animales, hongos, plantas o incluso microorganismos.
Dependiendo de las necesidades de los organismos, un hábitat puede ser tan amplio como un bosque o una ciudad, o tan pequeño como el tracto intestinal de un mamífero.
El concepto de hábitat es empleado en biología y ecología, así como también en el campo de la arquitectura y el urbanismo. Aunque existen varias definiciones del término, todas tienen en común que se refieren al emplazamiento de la vida: el lugar donde puede hallarse un elemento biótico.
No debe confundirse el término hábitat con el de nicho ecológico. Este último designa aspectos específicos del modo en que los organismos se relacionan dentro de su hábitat. Así, un hábitat puede contener muchos nichos ecológicos distintos.
Puntos clave
- Un hábitat es un espacio físico con condiciones adecuadas para que vivan distintas especies.
- Los hábitats se clasifican en marinos, terrestres y de aguas continentales, según las características del ambiente y sus recursos.
- Se diferencia del nicho ecológico, ya que este describe el papel de una especie en el ecosistema.
Ver además: Ecosistema
Tipos de hábitat

Los tipos de hábitat se definen según las particularidades de una región específica, especialmente su vegetación y sus condiciones climáticas.
Los hábitats se suelen clasificar en:
- Hábitats marinos. Son aquellos ubicados en la hidrósfera, es decir, en los océanos y mares. Incluye tanto regiones localizadas en la superficie (por ejemplo, las costas) como en las profundidades (por ejemplo, los manglares y los arrecifes de coral).
- Hábitats terrestres. Son aquellos ubicados en la geósfera, es decir, en tierra firme. Por ejemplo, las montañas, los valles y las planicies, entre muchos otros.
- Hábitats de aguas continentales. Son aquellos ubicados en las aguas dulces, o sea, en lagos, ríos y otros emplazamientos de agua alejados del mar.
Ejemplos de hábitat
Los ejemplos de hábitats pueden ser sumamente variados. Un lago y sus ríos afluentes pueden ser el hábitat de cierto tipo de salmón, mientras que el bosque que los rodea bien puede ser el hábitat del oso que intentará capturarlos cuando salten corriente arriba.
Al mismo tiempo, la parte alta de las montañas, desde donde desciende el río, puede ser el hábitat de grandes aves como el águila, mientras que, del otro lado, el delta o la desembocadura del río será el hábitat de ciertos tipos de cocodrilo.
Hábitat del león

El león (Panthera leo) es un mamífero carnívoro capaz de vivir en un amplio rango de hábitats alrededor de África (desde Sudáfrica hasta Sudán y desde Kenia a Nigeria).
Se lo encuentra en regiones extensas, secas y calurosas (sabanas y pastizales), en las cuales reina como el máximo depredador de las cadenas tróficas.
Los leones viven y cazan en grupos familiares, en los cuales las hembras realizan la mayor parte de la caza y los machos se encargan de proteger el territorio de la manada. Son el único grupo de grandes felinos que vive de esta manera.
Actualmente, esta especie se encuentra en peligro de extinción, según informes de la International Union for the Conservation of Nature (IUCN).
Más en: León
Hábitat del jaguar

El jaguar (Panthera onca) es un felino que vive en los bosques tropicales húmedos y templados del continente americano. Habita especialmente en los bosques mexicanos (como en Sonora o Yucatán), pero también en Guatemala y El Salvador.
Se distribuye principalmente en la región amazónica compartida por Venezuela, Colombia, Brasil, Ecuador, Perú y Bolivia. También es posible hallar jaguares en la región noreste de Argentina, en donde se los conoce como yaguareté.
Nicho ecológico
Un nicho ecológico es el papel que desempeña una especie dentro de un ecosistema. Incluye todos los aspectos de su interacción con el entorno, es decir, tanto el intercambio de materia y energía como las relaciones con otras especies (depredación, simbiosis, parasitismo, entre otras).
En otras palabras, cuando se habla del nicho ecológico de una especie, se menciona su relación puntual con los demás elementos que forman parte de su ecosistema.
Por ejemplo, los insectos polinizadores ocupan un rol determinado en el ecosistema que es indispensable para la reproducción de las plantas.
Así, puede haber dos tipos distintos de nicho ecológico:
- Nicho ecológico fundamental o potencial. Se refiere a ciertos límites ambientales de temperatura, humedad y alimento dentro de los cuales una especie puede crecer, reproducirse y sobrevivir, sin considerar las relaciones de competencia. Es decir, es el conjunto de condiciones bióticas y abióticas bajo las cuales una especie subsiste. Por ejemplo, las abejas, potencialmente, podrían ser polinizadoras de todas las plantas de un ecosistema.
- Nicho ecológico efectivo o real. Es la parte del espacio ecológico donde efectivamente existe la especie, es decir, es un subconjunto del nicho potencial. Contempla especialmente las interacciones con otras especies. Por ejemplo, las abejas polinizan solamente un tipo de planta, pues las demás son polinizadas por colibríes.
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Referencias
- Born Free Foundation. (s.f.). Everything you need to know about lions. https://www.bornfree.org.uk/
- López García, M. Á. (2007). Descripción y caracterización de nichos ecológicos: una visión más cuantitativa del espacio ambiental [Tesis de Maestría, Centro de Investigación en Matemáticas, A.C., CIMAT]. https://cimat.repositorioinstitucional.mx/
- Real Academia Española. (2024). Hábitat. Diccionario de la lengua española. https://dle.rae.es/
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