Guerra

Te explicamos qué es la guerra y cuáles son sus causas. Además, los tipos de guerra y las guerras mundiales.

Guerra
Una guerra es un conflicto armado entre Estados, comunidades o facciones políticas.

¿Qué es la guerra?

La guerra es un conflicto armado entre dos o más grupos humanos que emplean tácticas, estrategias y tecnología con el fin de imponerse mediante el uso de la fuerza sobre el adversario. Es la forma de conflicto más extrema que puede darse entre dos o más Estados, comunidades o facciones políticas, pues involucra la movilización de tropas y armamento y el intercambio mutuo de actos de violencia.

La guerra forma parte de las relaciones humanas desde los inicios de la civilización, e incluso hay evidencia de conflictos violentos entre comunidades desde la prehistoria. Muchos cambios políticos, sistemas económicos, procesos de mestizaje y adelantos tecnológicos fueron consecuencia de guerras. Estas, a su vez, provocan muertes, desplazamiento de poblaciones y destrucción material. En el siglo XX, el uso de la tecnología industrial en conflictos armados provocó la devastación de ciudades enteras y la muerte de millones de combatientes y civiles. Además, las guerras fueron el contexto en el que se perpetraron algunos genocidios.

Las características de las guerras fueron cambiando a lo largo de la historia, así como las reglas que regulan su funcionamiento y el comportamiento militar. En la actualidad, se consideran vigentes diversas normas, como las que reúne el derecho humanitario internacional, que intenta limitar los efectos de las guerras al regular la conducta de los combatientes, proteger a los civiles y prohibir ciertos tipos de armas. Las guerras también suelen variar en función del origen de los combatientes, pues pueden ser soldados profesionales, civiles reclutados, mercenarios o una combinación de todos estos.

Sin embargo, hay quienes consideran que todo intento de regular la guerra o atenuar sus efectos es un ideal inalcanzable, ya que incluso con la existencia de normas internacionales se siguen vulnerando derechos y ejerciendo actos criminales en contextos de guerra. Aun así, la existencia de estándares jurídicos permite juzgar crímenes de guerra y asistir a las víctimas.

La guerra fue objeto de múltiples reflexiones teóricas y filosóficas. Según Carl von Clausewitz (1780-1831), militar prusiano que escribió el libro De la guerra (publicado en 1832),“la guerra es la continuación de la política por otros medios”, es decir, no tiene una lógica propia sino que es un instrumento de la política. Por otro lado, El arte de la guerra, un tratado del siglo V a. C. atribuido al pensador chino Sun Tzu, contiene enunciados muy influyentes en la estrategia militar contemporánea, como por ejemplo: “Un buen estratega vence al ejército enemigo sin luchar”.

Puntos clave

  • La guerra es un conflicto armado entre dos o más grupos humanos, que emplean tácticas y tecnología para imponerse mediante la fuerza al adversario.
  • Desde sus orígenes hasta la actualidad, provocó cambios políticos, avances tecnológicos y pérdidas humanas y materiales.
  • Las causas de las guerras pueden ser territoriales, económicas, políticas, religiosas, ideológicas o étnicas.
  • Existen diferentes tipos de guerra, por ejemplo: convencionales, civiles, de guerrillas, totales, nucleares, religiosas, híbridas y subsidiarias.
  • Hasta el momento, las guerras más devastadoras fueron las dos guerras mundiales del siglo XX, que provocaron millones de víctimas en tan solo unos pocos años.

Principales causas de las guerras

Exhibición Rey de Asiria en el Museo Británico
En la Antigüedad, las guerras solían iniciarse por motivos de expansión territorial. [Imagen: Carole Raddato]

Las causas de las guerras pueden variar según el contexto social, político, económico y cultural en el que se producen, y según las características e intereses de los actores involucrados. Generalmente, no existe una única razón para el estallido de una guerra, sino un conjunto de causas y motivaciones que confluyen y desencadenan el enfrentamiento armado.

En la prehistoria, los conflictos entre grupos podían deberse a luchas por recursos, territorio, prestigio, desconfianza mutua o rivalidades tribales. En la Edad Antigua, las guerras solían iniciarse por motivos de expansión territorial (es decir, para adueñarse de tierras cultivables, recursos económicos, mano de obra o áreas estratégicas para acceder a vías de intercambio). Este fue el caso de las guerras de conquista que libró la República romana, y luego el Imperio romano, en Europa, África y Asia. Esta motivación continuó siendo frecuente en épocas posteriores.

Muchas de las guerras antiguas se debían también a consideraciones religiosas, generalmente como expresión de la voluntad de algún dios que ofrecía la victoria al rey (por ejemplo, Amón Ra durante la época de los faraones guerreros en el Antiguo Egipto). En la Edad Media, los reinos cristianos y la Iglesia católica se enfrentaron con los Estados musulmanes, con quienes mantenían enfrentamientos religiosos y culturales profundos. El ejemplo más claro fueron las Cruzadas, cuyo objetivo era la reconquista cristiana de Jerusalén, ciudad considerada sagrada por las religiones judía, cristiana y musulmana. En la Edad Moderna, también se enfrentaron católicos y protestantes en las llamadas “guerras de religión”.

A partir de finales del siglo XVIII, las guerras revolucionarias y la formación de los Estados-nación introdujeron dos motivaciones: la defensa de la soberanía nacional y el deseo de una población de independizarse del dominio colonial. Esto último fue característico de las guerras de independencia hispanoamericanas, que en el siglo XIX cortaron el vínculo político con España. Por otro lado, la defensa o el engrandecimiento de la nación fueron motivaciones frecuentes en los siglos XIX y XX, a menudo vinculadas con intereses económicos.

Finalmente, muchos conflictos armados, especialmente guerras civiles y de guerrillas, se deben a la existencia de dos o más facciones políticas que se disputan la conducción de una nación, principalmente por diferencias políticas, económicas o ideológicas, como fue el caso de la guerra civil española (1936-1939) y del conflicto armado en Nicaragua antes y después del triunfo de la Revolución Sandinista en 1979. También se pueden deber a conflictos étnicos, nacionalistas o separatistas en los que distintos grupos dentro de un Estado, que se identifican como pueblos o naciones diferentes, luchan por el poder o por separarse y formar un Estado propio, como sucedió en los territorios de la antigua Yugoslavia en la década de 1990.

Tipos de guerra

Según sus características y los propósitos de sus participantes, las guerras pueden ser de distintos tipos:

  • Guerra convencional. Es un conflicto de tipo tradicional entre dos o más ejércitos pertenecientes a distintos Estados, que combaten en campos de batalla con armas convencionales (es decir, sin armas químicas, biológicas ni nucleares), y que en ocasiones pueden combinarse con combates navales y aéreos. El objetivo es vencer, desarmar y lograr la rendición de las fuerzas militares del enemigo.
  • Guerra civil. Es un conflicto armado en el que se enfrentan dos o más bandos políticos, sociales o étnicos dentro de un mismo país, con el objetivo de controlar las instituciones del gobierno o de imponer un modelo sociopolítico o socioeconómico. En este caso, los combatientes no suelen ser solamente militares, sino que se involucra gran parte de la población en el enfrentamiento.
  • Guerra de guerrillas. Es un conflicto en el que se enfrentan una fuerza militar irregular, que emplea tácticas de ataque a pequeña escala y rápida retirada, y una fuerza militar regular, como las fuerzas armadas o policiales, que en ocasiones recurren a técnicas de contrainsurgencia.
  • Guerra total. Es un conflicto en el que las naciones involucradas movilizan todos los recursos (humanos y materiales) disponibles para enfrentar y vencer completamente al enemigo. Las dos guerras mundiales son ejemplos de este tipo de guerra.
  • Guerra nuclear. Es un conflicto que se basa en el desarrollo y uso de armas nucleares de destrucción masiva. Es un concepto que surgió a mediados del siglo XX, tras el lanzamiento de dos bombas atómicas estadounidenses sobre suelo japonés en 1945. A lo largo de la Guerra Fría, la posibilidad de una guerra nuclear demostró ser un peligro para toda la humanidad y el planeta, ya que las bombas atómicas podrían destruir ciudades y regiones enteras y desencadenar altos niveles de exposición a la radiación. Por tal razón, se tomaron medidas para evitar una escalada de este tipo y, hasta el momento, nunca hubo una guerra nuclear.
  • Guerra santa o religiosa. Es un conflicto que responde principalmente a motivos religiosos o cuyos participantes justifican sus acciones militares en la defensa de un sistema de creencias. La suele convocar una autoridad religiosa, que moviliza a soldados o fieles que creen que su religión es la única legítima y verdadera y que sus adversarios son infieles.
  • Guerra híbrida. Es un conflicto característico del siglo XXI, que involucra múltiples técnicas orientadas a alcanzar los objetivos militares, como las tácticas de la guerra convencional y de la guerra de guerrillas, sumadas a la difusión de noticias falsas (fake news) para desmoralizar al enemigo o confundir a la opinión pública y la “guerra cibernética”, que permite obtener información, filtrar datos o hackear los sistemas informáticos del enemigo.
  • Guerra subsidiaria. También llamada “guerra por delegación” y “proxy war”, es un conflicto en el que dos o más Estados, generalmente potencias mundiales, apoyan militar o económicamente a uno u otro bando en una guerra librada en otra región, ya sea entre las fuerzas regulares de dos países o entre facciones rivales dentro de un país. De este modo, las dos potencias no se enfrentan entre sí de manera directa, sino que apoyan a sectores afines a sus respectivos intereses en otras regiones del mundo. Por ejemplo, la intervención de Estados Unidos y la Unión Soviética en diversos conflictos militares durante la Guerra Fría.

Guerras mundiales

Aviones de la Segunda Guerra Mundial
La Segunda Guerra Mundial se extendió de 1939 a 1945. [Imagen: Everett Collection]

Las guerras mundiales fueron eventos bélicos de gran magnitud, que involucraron a decenas de países (liderados por las potencias del momento) y en los que pocos países pudieron conservar su neutralidad. Los efectos de estas guerras fueron devastadores, pues provocaron millones de muertos y heridos, además de enormes pérdidas materiales.

Hasta el momento ha habido dos guerras mundiales, ambas en el siglo XX: la Primera Guerra Mundial (o Gran Guerra) de 1914 a 1918 y la Segunda Guerra Mundial de 1939 a 1945. La Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética (URSS), que duró cuarenta y cinco años (entre 1947 y 1991), fue un enfrentamiento de alcance mundial, pero con la salvedad de que los contendientes no se enfrentaron nunca de forma directa, sino a través de su intervención en guerras libradas en otros países y de sus intentos por extender su influencia política, económica y cultural a la mayor parte del mundo.

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Referencias

  • Centeno, M. A. y Enriquez, E. (2016). War and Society. Polity Press.
  • Dyer, G. (2007). Guerra. Belacqua.
  • Frankel, J. (2024). War. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com/
  • Keegan. J. (2014). Historia de la guerra. Turner.
  • von Clausewitz, C. (1984). De la guerra (edición original de 1832). Labor.

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Gayubas, Augusto (24 de octubre de 2024). Guerra. Enciclopedia Concepto. Recuperado el 24 de octubre de 2024 de https://concepto.de/guerra/.

Sobre el autor

Última edición: 24 de octubre de 2024
Revisado por Augusto Gayubas
Doctor en Historia (Universidad de Buenos Aires)

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