Poder

Te explicamos qué es el poder y qué tipos de poder existen en una sociedad. Además, los poderes político, público, económico y militar.

¿Qué es el poder?

El poder es la capacidad de una persona o un grupo de hacer que algo ocurra. En su sentido político y social, se define como la capacidad de un individuo o un grupo de liderar, influenciar o dominar a otros, a veces mediante la fuerza, para que hagan ciertas cosas o se sometan a su voluntad. En este sentido, un padre puede ejercer el poder sobre sus hijos, y un gobierno sobre sus ciudadanos.

El sociólogo alemán Max Weber (1864-1920) definió el poder como la “probabilidad de imponer la propia voluntad dentro de una relación social, aun contra toda resistencia y cualquiera sea el fundamento de esa probabilidad”. En las sociedades contemporáneas, la idea de poder está asociada también a la de autoridad. De hecho, se suele llamar “autoridades” a quienes ejercen funciones directivas o de mando en diversas instituciones, ya sean sociales, políticas, militares o empresariales.

Sin embargo, Weber llamó autoridad al poder ejercido de forma legítima. Por eso, algunos autores consideran que el poder es toda capacidad de liderazgo, influencia o dominación, incluso si se basa exclusivamente en la violencia; mientras que la autoridad es la capacidad de influir en los demás a partir de la legitimidad (basada en la ley, la tradición o el carisma) y no de la fuerza.

Muchas ciencias sociales se dedican al estudio del poder y de sus mecanismos o formas de ejercicio, tales como la sociología, las ciencias políticas y el derecho. Si bien cada una de estas disciplinas tiene sus propias herramientas de análisis, en ocasiones dialogan entre sí o comparten definiciones mediante perspectivas interdisciplinarias.

Ver también: Poder adquisitivo

Tipos de poder

Según los psicólogos sociales estadounidenses John R. P. French y Bertram Raven, el poder puede clasificarse de acuerdo a seis formas distintas, que ellos llaman las “bases del poder social”. Estos tipos de poder son:

• Poder coercitivo. Es aquel que emplea la fuerza, la amenaza o la intimidación para lograr que el otro acate una orden o se someta a la propia voluntad. Esto puede incluir medios físicos, sociales, emocionales o económicos, como la imposición de un castigo, una multa o la desaprobación social, aunque la coacción no siempre es evidente ni llega a ejercerse de forma concreta.
• Poder por recompensa. Es aquel que ofrece un premio o una remuneración a quien acata los designios de la persona que ejerce el poder. Dichas recompensas pueden ser tangibles (como sumas de dinero o bienes materiales) o intangibles (como honores o reconocimientos), y positivas (premios) o negativas (castigos).
• Poder legítimo. Es aquel que ejercen las instituciones que son reconocidas por la sociedad, es decir, cuya autoridad se adecua a la ley o la tradición, y no surge de una usurpación por la fuerza. Por ejemplo, un mandatario elegido democráticamente mediante el sufragio. Es un poder formal, que ocupa una posición jerárquica en la sociedad.
• Poder referente. Es aquel que depende de la admiración, el respeto o la confianza que una persona o un grupo de personas profesan hacia una persona o líder, a quien interpretan como un modelo a seguir. Las personas influidas por este tipo de poder encuentran satisfacción en hacer lo que el referente espera de ellos.
• Poder del experto. Es aquel que se basa en la autoridad de una persona o un grupo en un área determinada, es decir, en su conocimiento acumulado, sus saberes especializados o profesionales o su talento y capacidades para un tema, un asunto o una labor. Se suele sostener en las credenciales (como puede ser un título universitario), la reputación o la experiencia comprobada de la persona o el grupo en cuestión.
• Poder informativo. Es aquel que se desprende del acceso o control que un actor social tiene sobre la información, y que le permite persuadir o manipular a otros actores sociales al administrar la transmisión de dicha información. Este poder lo suelen poseer los medios de comunicación, que influyen en la opinión pública; pero también las personas, como los padres, que administran y controlan la información que le trasladan a sus hijos.

Poder político y poder público

El poder político es la capacidad de dirigir una sociedad desde las instituciones del Estado o de influir en las decisiones del gobierno a partir de la acción llevada a cabo desde partidos políticos u otros movimientos sociales que intervienen en el terreno político.A veces, el término “poder político” se usa como sinónimo de todo el personal político que participa en el Estado o en la lucha por acceder a él, que se alterna en el gobierno y que participa en el Parlamento (es decir, tanto el oficialismo como la oposición).

En los países democráticos, se considera que el pueblo delega el poder en quienes administran el Estado, para que estos tomen las decisiones políticas en su nombre. El conjunto de las instituciones y autoridades del Estado recibe el nombre de “poder público”. Como tal, se organiza en tres poderes diferentes e independientes, según la tradición republicana, que son el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial.

Poder Ejecutivo

En las democracias, el Poder Ejecutivo, también llamado gobierno, es encabezado por un jefe de Estado o un jefe de gobierno (generalmente, un presidente o primer ministro), elegido por el voto popular. Además, está integrado por su gabinete de ministros y por otros cargos, como los gobernadores y alcaldes.

Este poder se ocupa de la conducción política y administrativa del Estado, es decir, de ejecutar las leyes y encargarse de la toma de decisiones respecto a cómo distribuir los recursos y qué medidas tomar en interés del Estado o de la sociedad.

Poder Legislativo

El Poder Legislativo reside en el Parlamento o la Asamblea Legislativa, dentro de la cual tienen representación los distintos partidos políticos de una nación, en diferentes proporciones de acuerdo a la cantidad de votos populares obtenidos.

Este poder se ocupa de deliberar, redactar, promulgar y derogar las leyes, y de debatir y supervisar la administración de presupuestos o la aprobación de poderes especiales para el Poder Ejecutivo, entre otras funciones. Ejerce una forma de control o vigilancia que limita al Poder Ejecutivo mediante las leyes, y puede estar compuesto por una o dos cámaras (diputados y senadores).

Poder Judicial

El Poder Judicial se compone de una estructura jerárquica de tribunales y juzgados, a la cabeza de la cual está generalmente el Tribunal Supremo de Justicia. Sus miembros no son electos por sufragio, sino designados por mérito y mediante mecanismos en los que suelen participar los otros dos poderes.

Este poder es el encargado de interpretar las leyes en el marco de la Constitución, y de ejercer las sanciones o reparaciones necesarias para garantizar la justicia y la paz social en la comunidad.

Más en: Poderes del Estado

Poder económico

El poder económico es la capacidad de influir en la política y la sociedad que tienen algunas empresas y grupos económicos que concentran muchas riquezas. Su capital les permite financiar campañas electorales o comprar voluntades de legisladores y gobiernos, lo que puede favorecer la aplicación de medidas políticas favorables a sus intereses.

Los grupos con poder económico también pueden controlar algunos medios de comunicación para influir en la opinión pública o ejercer presión sobre un gobierno. Además, pueden absorber otras empresas y dificultar la competencia, a través de prácticas como el abaratamiento de precios y el subsecuente dominio del mercado.

Poder militar

El poder militar o poderío militar es la capacidad material y organizativa que tienen las Fuerzas Armadas de un país. Incluye la suma de los efectivos, los armamentos, los equipos y las habilidades tácticas, operativas y estratégicas de su ejército, su armada y su aviación, considerada desde un punto de vista estrictamente bélico, es decir, en relación con la posibilidad de vencer a un enemigo en un conflicto armado.

Desde tiempos antiguos, los Estados dependieron de sus ejércitos para defender sus recursos, sostener sus fronteras y conquistar territorios. Aún hoy, las potencias militares ocupan un lugar predominante en el orden mundial, pues pueden imponer ciertos términos a las naciones más débiles, a pesar de que la guerra suele ser evitada y, en general, solo se acude a ella como un último recurso.

En este sentido, una potencia militar (es decir, un país con un elevado poder militar) es una nación cuyas fuerzas armadas son poderosas, modernas y se encuentran bien entrenadas y equipadas. Sin embargo, los Estados con una fuerza militar menos importante también dependen de algún grado de poder militar para conservar sus fronteras, disuadir a otras naciones o grupos militares de posibles ataques y, en caso de un enfrentamiento, vencer al enemigo o forzar una negociación.

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Referencias

• Bobbio, N., Matteucci, N. y Pasquino, G. (Dirs.). (2015). Diccionario de política. Siglo XXI.
• Mann, M. (1991-1997). Las fuentes del poder social. 2 vols. Alianza.
• Munro, A. (2024). Power. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com
• Raven, B. H. (2004). Power, Six Bases of. Encyclopedia of Leadership. SAGE. https://study.sagepub.com
• Vallès, J. M. (2006). Ciencia política. Una introducción. Ariel.
• Weber, M. (2014). Economía y sociedad. Fondo de Cultura Económica.