Culturas andinas

Te explicamos qué son las culturas andinas, sus formas de gobierno, su ubicación y otras características. Además, cómo era cada una de ellas.

¿Qué son las culturas andinas?

Se conoce como culturas andinas al conjunto de civilizaciones precolombinas desarrolladas a lo largo de varios milenios en las inmediaciones de la cordillera de los Andes, en la región occidental de Sudamérica. Las primeras culturas andinas se establecieron alrededor del 9000 a. C. y las últimas permanecieron hasta la llegada de los conquistadores españoles, a mediados del siglo XVI.

Estas culturas se extendieron en la parte oeste de América del Sur, en los actuales territorios de Argentina, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia y la región oeste de Venezuela. La andina fue un área cultural fértil y diversa, y una de las cunas de la civilización. Se trató de una sociedad compleja, autónoma e independiente del resto del mundo, como lo fueron también Mesoamérica o Mesopotamia.

Se estima que los primeros habitantes de esta región llegaron durante el período Paleolítico, hacia el año 12000 a. C. Aunque cada hallazgo arqueológico impulsa una reconfiguración y reinterpretación de la historia de los antiguos pueblos andinos, se cree que cerca del año 4000 a. C., tras milenios de acumular conocimiento sobre las cualidades del territorio, se comenzaron a domesticar animales y plantas. Algunos siglos después, se habrían asentado las primeras aldeas. Alrededor del año 2500 a. C., surgieron los primeros templos, y con ellos las formas iniciales de jerarquía social.

Existen tres teorías respecto al origen de las culturas andinas, sostenidas por diferentes estudiosos y con distintas visiones de estas civilizaciones prehispánicas:

• La teoría difusionista de Max Uhle (1856-1944). Propuso que estas civilizaciones se habrían originado en la costa y posteriormente se habrían expandido hacia la montaña. Esta visión sostiene que hubo algún tipo de influencia mesoamericana en la organización de los pueblos pesqueros primitivos de la región peruana, algo que la mayoría de los estudiosos descarta.
• La teoría autoctonista de Julio C. Tello (1880-1947). Propuso que estas culturas se habrían originado en la selva amazónica peruana, con los Chavín como cultura primigenia. Posteriormente, se habrían esparcido por los territorios cercanos. Aunque otros autoctonistas descartaron también las influencias externas, admitían la posibilidad de un origen costero.
• La teoría aloctonista de Federico Kauffman Doig (1928-). Propuso la cultura Valdivia, que se desarrolló en la costa de Ecuador hacia 3000 a. C., como el origen más probable de las civilizaciones andinas. Posteriormente, desarrolló otra teoría llamada “ecologista”, según la cual el desarrollo de las culturas andinas habría estado determinado por una insuficiencia de tierras cultivables frente al aumento de la población.

En cualquier caso, las diferentes perspectivas de estudio de las culturas andinas coinciden en que su período de auge o florecimiento se ubicó entre los siglos I y IX d. C.

Por otro lado, se estima que estas civilizaciones oscilaron a lo largo de su historia entre períodos de dispersión regional, con marcadas diferencias entre una sociedad y otra, y períodos de integración, en los que una cultura dominante se impuso sobre las demás, como fue el caso del Imperio inca.

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Características de las culturas andinas

Si bien el conjunto de las culturas andinas es muy diverso, es posible hallar ciertos rasgos comunes en ellas, tales como:

• Eran culturas fundamentalmente agrícolas. Las culturas andinas pudieron adaptarse a diferentes medios y climas, tanto de costa como de montaña. Domesticaron diversas variantes de maíz, papa, quinoa, yuca, maní, coca, cacao, camote, frijoles, ajíes, algodón y zapallos, y se dedicaron al pastoreo de camélidos como llamas y alpacas.
• Desarrollaron grandes plataformas y estructuras. Los sistemas de irrigación, andenes (plataformas escalonadas en las regiones montañosas) y terraplenes (elevaciones de tierra en zonas planas), así como el arado de pie andino (chaquitaclla) y las técnicas de deshidratación y almacenamiento de alimentos desarrollados por estas culturas, les permitieron maximizar el provecho de los terrenos y optimizar la producción agrícola.
• Compartieron una cosmovisión y un imaginario religioso. Las culturas andinas construyeron un complejo universo religioso basado en la idea de una fuerza vital que atravesaba el mundo humano y el mundo natural, con la Pachamama o Madre Tierra, diosa de la vida, la fertilidad y la abundancia, como principal deidad, a la que rendían culto por medio de rituales y ceremonias.
• Tenían un rico universo artístico.Las civilizaciones andinas desarrollaron la cerámica, el tejido, el arte plumario, la arquitectura y la metalurgia. Si bien hoy sus piezas son apreciadas por su gran valor estético, fueron creadas con funciones religiosas, sociales o utilitarias específicas. Podían ser representaciones de dioses o animales sagrados usadas en ceremonias y rituales, atavíos para identificar estatus y pertenencia a un grupo, prendas para vestirse o vasijas para cocinar y contener alimentos.

¿Cuáles fueron las culturas andinas?

Las culturas andinas fueron muchas y muy variadas. Las principales fueron:

Cultura caral

La civilización Caral surgió alrededor del 3000 a. C. y se desarrolló hasta el 1800 a. C. Es la cultura andina de mayor y más sólida evidencia arqueológica. Gracias a los descubrimientos y estudios realizados por la antropóloga y arqueóloga Ruth Shady, la Ciudad Sagrada de Caral-Supe, ubicada a 182 kilómetros de Lima, es hoy considerada la ciudad más antigua de América. Los estudiosos comparan la antigüedad y singularidad de esta cultura con las ancestrales civilizaciones egipcia, mesopotámica, india y china, pero, a diferencia de ellas, Caral se desarrolló en el más completo aislamiento. La evidencia que se conoce hasta la fecha sugiere que se trata de la civilización matriz del Perú.

Cultura incaica

La civilización incaica es célebre por erigir la mayor unidad política de Sudamérica en cuanto a territorio y poder: el Imperio inca, que se extendió por más de dos millones de kilómetros y ejerció su control político sobre los actuales territorios de Perú, Bolivia, Ecuador, Chile, Colombia y el norte de Argentina. Fue la civilización precolombina que logró organizar la resistencia más efectiva contra la conquista europea, a lo largo de varias décadas. Su imperio, conocido como el Tahuantinsuyo, tuvo como capital la ciudad de Cusco. Contó con importantes edificaciones militares y conmemorativas, centros ceremoniales y palacios en Coricancha, Sacsayhuamán, Machu Picchu, Ollantaytambo y Písac. Aunque el imperio cayó en 1533 ante los conquistadores españoles, hubo un reducto incaico en resistencia hasta 1572 (los llamados incas de Vilcabamba).

Cultura huari (wari)

La cultura huari fue una de las civilizaciones más importantes de los Andes centrales. Se desarrolló entre los siglos VIII y XIII d. C., y fue una civilización imperial cuya ciudad capital, Wari, se hallaba a unos 20 kilómetros de la actual ciudad de Ayacucho. Fue una cultura mayormente guerrera y religiosa, con un alto nivel de organización y una estructura social compleja. Junto con el Imperio inca, fue una de las potencias sudamericanas, que ejerció gran influencia sobre la sierra y la costa del actual territorio peruano.

Cultura nazca

La cultura nazca se desarrolló principalmente en los valles del Ica, en el actual Perú, entre los siglos I y IV d. C. Es célebre por sus trazos precisos y de gran escala que representan figuras de animales sobre la pampa de Jumana, conocidos como las “líneas de Nazca”, cuya función continúa siendo un enigma para los estudiosos y motivo de muy diversas especulaciones. Además de su colorido arte cerámico, que registra detalles de la vida cotidiana, se destaca su gran dominio de la ingeniería, como lo evidencia el hallazgo de grandes canales subterráneos destinados al riego.

Cultura Paracas

La cultura Paracas, otro importante hallazgo del arqueólogo Julio César Tello, se instaló en la península de Paracas, 18 kilómetros al sur de la ciudad de Pisco, entre los años 700 a. C. y 200 d. C. Se caracterizó por su elaborada textilería, con coloridos motivos geométricos y figuras animales y humanas, su cerámica de singulares diseños y su elaborada cestería. Su paralelismo cultural con Nazca ha llevado a algunos investigadores a considerarla una etapa temprana de esa cultura.

Cultura chavín

La cultura chavín fue descubierta por el arqueólogo Julio César Tello en 1919. Ubicada en la cuenca alta del río Marañón, esta civilización se desarrolló entre el 1200 y el 400 a. C. Su centro ceremonial fue la antigua ciudad de Chavín de Huántar, ubicada a 462 kilómetros de Lima. De los chavín sobreviven importantes obeliscos y estelas (monumentos hechos con una sola pieza de piedra), así como elaboradas esculturas y restos arquitectónicos que evidencian un gran dominio de la ingeniería. Inicialmente, se supuso que la chavín era la cultura matriz del Perú, hasta que se demostró que la cultura caral era mucho más antigua.

Cultura tiahuanaco (tiwanaku)

La cultura tiahuanaco (en aimara, tiwanaku) fue una importante civilización precolombina que floreció en Bolivia, Perú y el norte de Chile y Argentina entre 1500 a. C. y 1187 d. C. Su principal centro de influencia fue la región del lago Titicaca, y desde allí se expandió hacia los valles cercanos, la costa del Pacífico y San Pedro de Atacama, en el sur. Se trata de una cultura longeva, sobresaliente en la cerámica y los textiles. Su ciudad principal, Tiwanaku, fue abandonada hacia el año 1200 d. C. por motivos que han sido materia de debate. Sus vestigios culturales prácticamente desaparecieron, pero su gran influencia religiosa, cultural y política sobrevivió a través de prácticas adoptadas por civilizaciones posteriores, incluido el Imperio inca.

Cultura timoto-cuica

La cultura timoto-cuica se asentó en los Andes venezolanos (estados de Mérida, Táchira y Trujillo). Estuvo estrechamente vinculada con la cultura chibcha o muisca, que ocupó territorios de la actual Colombia. Estaba conformada por tribus diversas: timotos, carachis, capachos, betijoqueyes, mucuchíes, guaraques, taribas, cuicas, escuqueyes, tabayes, guitas, chachopos y licuipos, que compartieron rasgos como el cultivo agrícola en terrazas montañosas, la domesticación del pavo y la guacharaca, y la formación guerrera. Se estima que tuvieron contacto con otras culturas precolombinas, como los caribe o los arahuacos.

Tipo de gobierno de las culturas andinas

En general, las culturas andinas se condujeron de manera teocrática, con gobiernos monárquicos o sacerdotales, en los que la religión ocupaba un rol central como organizadora de la vida comunitaria.

Dependiendo de la cultura y del momento histórico, es posible hallar pequeñas comunidades dispersas con formas locales de jefatura o cacicazgo, o grandes estructuras sociales como el Imperio inca o el Imperio huari.

El ayllu fue una forma comunitariabasada en la identidad territorial y los lazos de parentesco. Se trataba de una unidad social, económica, religiosa y política. Sus miembros trabajaban la tierra y organizaban la producción y distribución agrícola de manera colectiva. Las jerarquías, las responsabilidades y los roles de cada miembro eran establecidos internamente en cada ayllu.

Con la llegada del Imperio inca, estas formas comunitarias fueron integradas a una estructura estatal centralizada.

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Referencias

• Makowski, K. (2004). Primeras civilizaciones. Enciclopedia Temática del Perú, t.2. El Comercio.
• Matos, R. (1984). El proceso de desarrollo de la cultura andina. Boletín de la Asociación Europea de Profesores de Español, XVI(30), 85-87.
• Shady, R. (2006). La civilización Caral: sistema social y manejo del territorio y sus recursos. Su trascendencia en el proceso cultural andino. Boletín de Arqueología PUCP, (10), 59-89. https://revistas.pucp.edu.pe/
• Silva Sifuentes, J. (2000). Origen de las civilizaciones andinas. En T. Hampe Martínez (Ed.), Historia del Perú. Lexus.