Tipos de Estado

Te explicamos cuáles son los tipos de Estado según su organización territorial, su organización política o su sistema de gobierno.

¿Cuáles son los tipos de Estado?

Los tipos de Estados son las diferentes formas que puede adoptar una entidad política estatal en determinados países y en distintos momentos de la historia. Los tipos o formas de Estado pueden distinguirse según diversos criterios de clasificación. Por ejemplo:

• Según su organización territorial, se puede distinguir entre Estados unitarios, Estados unitarios regionalizados, Estados federales, Estados confederales y Estados dependientes.
• Según su organización política, se puede diferenciar entre repúblicas y monarquías. Dentro de estas, se puede distinguir entre repúblicas presidencialistas, semipresidencialistas, parlamentarias y unipartidistas, y entre monarquías absolutas, constitucionales y parlamentarias.
• Según su sistema de gobierno, se puede distinguir entre democracias, dictaduras y autocracias.

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Tipos de Estado según su organización territorial

Según el modo en que se organiza su territorio, se puede diferenciar entre distintos tipos o formas de Estado:

• Estados unitarios. Son aquellos en los que existe un gobierno único y central, cuya sede se ubica en la capital del país y que gobierna sobre el territorio de manera homogénea. Aun así, los Estados unitarios pueden ser completamente centralistas, cuando el gobierno central concentra todo el poder (centralismo concentrado), o pueden permitir cierto grado de descentralización administrativa o política (centralismo desconcentrado), cuando existe un margen de autonomía regional concedido por la autoridad central. Por ejemplo: Colombia, Perú, Francia, el Reino Unido y Nueva Zelanda.
• Estados unitarios regionalizados. Son Estados unitarios descentralizados que paulatinamente ceden mayor soberanía a sus regiones o provincias, hasta el punto de reconocerles un estatuto político de autonomía como “regiones autónomas” o “comunidades autónomas”. En ocasiones, siguen siendo clasificados simplemente como Estados unitarios con grados variables de descentralización. Por ejemplo: España, Italia y Serbia.
• Estados federales o federaciones. Son aquellos que consisten en la unión de estados soberanos o provincias, que ceden a un gobierno central (llamado gobierno federal) una cuota importante de su autoridad política para funciones que conciernen al conjunto de la nación, pero retienen buena parte de su autonomía y sus propias leyes e instituciones de gobierno. Por lo tanto, en estos Estados coexisten los gobiernos locales o regionales, con su propia legislación, y un gobierno federal, con una Constitución común. Por ejemplo: Argentina, Brasil, Alemania, Rusia, México y Estados Unidos.
• Estados confederales o confederaciones. Son agrupaciones de estados independientes que, a diferencia de las federaciones, conservan su plena autonomía y pueden separarse de la confederación a voluntad, pues no están obligadas por una Constitución federal compartida. Sin embargo, mientras forman parte de ella, deben comprometerse con las políticas comunes tomadas de mutuo acuerdo y funcionar como una unidad política y territorial. Por ejemplo: las Provincias Unidas de los Países Bajos (1588-1795) y los Estados Confederados de América (1861-1865).
• Estados dependientes. Son aquellos que carecen de autonomía y soberanía plena sobre sus territorios, ya que están bajo la autoridad de un Estado más grande o poderoso. Los Estados dependientes tienen su propio gobierno y se reconocen como libres pero funcionan legalmente como satélites del Estado al que están asociados. Por ejemplo: Puerto Rico (territorio de Estados Unidos) y las Islas Cook (asociado a Nueva Zelanda).

Tipos de Estado según su organización política

Según el modo en que se organizan políticamente, se puede distinguir entre repúblicas y monarquías:

• Repúblicas. Son sistemas políticos en los que la soberanía reside en el pueblo, que elige a sus gobernantes, y en los que el poder público está distribuido en tres poderes autónomos, que se controlan mutuamente para evitar arbitrariedades y garantizar un equilibrio interno: el poder ejecutivo (el gobierno), el poder legislativo (el Parlamento, la asamblea o el congreso) y el poder judicial (los tribunales de justicia).
• Monarquías. Son sistemas políticos en los que la jefatura del Estado recae en un monarca, de carácter hereditario y vitalicio, que puede ejercer realmente el poder político o tener una función más nominal o simbólica.

A su vez, existen diferentes tipos de repúblicas y monarquías:

• Repúblicas presidencialistas. Son aquellas en las que el poder ejecutivo es ejercido por un presidente elegido directamente por el pueblo en elecciones democráticas, encargado de dirigir políticamente el país y cuyos poderes son delimitados por los otros dos poderes públicos. Este es el caso de países como Venezuela, Argentina, Brasil, México o Filipinas.
• Repúblicas semipresidencialistas. Son aquellas en las que el presidente, elegido por el voto popular, comparte el poder ejecutivo con un primer ministro, a menudo designado por el presidente pero que debe responder ante el Parlamento. Este es el caso de países como Senegal, Haití, Francia, Rusia o Taiwán.
• Repúblicas parlamentarias. Son aquellas en las que el poder ejecutivo no recae en un presidente, aun cuando este sea el jefe del Estado, sino en un primer ministro, elegido entre los partidos que integran el Parlamento. Esto significa que la población vota indirectamente por su primer ministro y que el poder ejecutivo y la conducción del Estado se someten en mayor medida al poder legislativo y al debate entre las distintas fuerzas políticas del país. Este es el caso de países como Alemania, Croacia, Italia, Israel o India.
• Repúblicas unipartidistas. Son aquellas en las que la totalidad de las instituciones del gobierno y los poderes del Estado están en manos de un único partido político. Estas repúblicas suelen ser caracterizadas como autoritarias, porque carecen de una democracia basada en la libertad política y el pluripartidismo. Este es el caso de Cuba, China, Vietnam, Eritrea o Corea del Norte.
• Monarquías absolutas. Son aquellas en las que el poder político y la soberanía se concentran enteramente en la figura de un rey o monarca, sin que existan leyes ni una separación de poderes que lo limiten o contradigan. También pueden existir instituciones públicas (como un Parlamento o unos tribunales) cuyo poder jamás puede contradecir ni superponerse al del rey. Este es el caso de Brunéi, Omán, Esuatini (antigua Suazilandia) o Arabia Saudita.
• Monarquías constitucionales. Son aquellas en las que el rey o monarca es el jefe del Estado y tiene algunas funciones de gobierno, pero su poder está sometido a una Constitución y debe compartir la responsabilidad política con un primer ministro y un Parlamento. Se considera un paso intermedio entre la monarquía absoluta y la monarquía parlamentaria. Este fue el caso del Reino Unido entre el siglo XVII y comienzos del siglo XX, Francia en algunos períodos posteriores a la Revolución francesa o Japón desde 1890 hasta 1945.
• Monarquías parlamentarias. Son aquellas en las que rigen los principios legales de las monarquías constitucionales pero con la salvedad de que el monarca desempeña un papel puramente ceremonial y representativo, mientras que el poder ejecutivo lo ejerce un primer ministro elegido entre los partidos que integran el Parlamento, aunque al mismo tiempo avalado por el rey. Es el caso del Reino Unido, Japón, España, Suecia, Bélgica o Malasia.

Tipos de Estado según su sistema de gobierno

Según el sistema de gobierno, se puede distinguir entre:

• Democracias. Son formas de gobierno en las que la soberanía reside en el pueblo, que elige a sus representantes políticos mediante el derecho al voto y el reconocimiento de la decisión de las mayorías. Además, en la actualidad, las democracias deben respetar las libertades políticas y de expresión, el imperio de la ley y los derechos humanos universales.
• Dictaduras. Son formas de gobierno no democráticas, a veces permanentes y a veces transicionales, en las que un pequeño grupo, generalmente una junta militar o la dirigencia de un partido, ejerce el poder político de manera autoritaria, sin respetar el principio de la división de poderes (aunque, en algunos casos, mantienen una fachada democrática). Pueden instaurarse mediante golpes de Estado o por sucesión política, y suelen suspender el estado de derecho y vulnerar los derechos humanos. En ocasiones, son encabezadas por un líder autocrático, y también pueden adoptar la forma de un régimen totalitario.
• Autocracias. Son formas de gobierno en las que el poder político está concentrado en una única persona, que gobierna sin restricciones legales y sin someterse a un sistema de separación de poderes. Puede tratarse de una monarquía absoluta, una dictadura o un régimen totalitario, siempre y cuando la máxima autoridad esté en manos de una sola persona (monarca, dictador, líder o caudillo).

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Referencias

• Bobbio, N., Matteucci, N. y Pasquino, G. (Dirs.). (2015). Diccionario de política. Siglo XXI.
• D’Auria, A. (2012). Teoría y crítica del Estado. Eudeba.
• Heslop, D. A. (2023). Political system. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com/
• Sartori, G. (1992). Elementos de teoría política. Alianza.
• Schlager, N. y Weisblatt, J. (Eds.). (2006). World Encyclopedia of Political Systems and Parties. Facts on File.