Árbol de Navidad

Te explicamos qué es el árbol de Navidad, cómo fue su origen y qué día debe colocarse. Además, te contamos qué elementos lo decoran.

¿Qué es el árbol de Navidad?

El árbol de Navidad o árbol navideño es uno de los elementos decorativos más típicos y largamente difundidos de la Navidad. Consiste en un árbol (idealmente un pino, abeto u otra especie perennifolia) decorado con luces, adornos y figuras de distinto tipo, aunque en muchos casos están fabricados de plástico u otros materiales sintéticos.

Junto al pesebre o belén, y a la figura de San Nicolás o Papá Noel, el árbol de Navidad es uno de los íconos centrales de esta festividad en Occidente. Lo usual es que haya uno en cada hogar y en cada entorno laboral, como un símbolo de la llegada de las fiestas. Además, a sus pies suelen depositarse los obsequios de Navidad y a su alrededor se suelen realizar encuentros o celebraciones familiares.

El significado exacto del árbol de Navidad puede ser difuso o variar dependiendo de la tradición local, si bien está directamente conectado con el imaginario invernal del hemisferio norte. Esto hace suponer que sus orígenes están en el norte del continente europeo, y en la relación sagrada que tuvieron los distintos pueblos paganos con los árboles.

En líneas generales, el árbol de Navidad simboliza la esperanza y la vida de cara al final del ciclo anual (al tratarse de un árbol perennifolio, o sea, que no pierde sus hojas con el frío), lo cual en el mundo cristiano coincide con el nacimiento del mesías, Jesús de Nazaret. Hay, sin embargo, quienes afirman que su decoración remite a las manzanas del árbol del Jardín del Edén, recordando a los cristianos el mito bíblico sobre la tentación y el origen del pecado, o que su brillo remite a la estrella de Belén, ubicada en ocasiones en lo alto del árbol.

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Origen e historia del árbol de Navidad

El origen exacto del árbol de Navidad es incierto, aunque muchas de sus raíces culturales apuntan a antiguas tradiciones paganas, vinculadas con la mitología o los relatos fundacionales. Muchas de estas tradiciones fueron absorbidas por el cristianismo durante la evangelización de Europa, y resignificadas para servir a un nuevo imaginario.

Por ejemplo, en la mitología nórdica se habla de Yggdrasil, el árbol del universo o del mundo, en cuya copa residían los dioses (asgard) y cuyas raíces se adentraban en el mundo de los muertos (helheim). Dicho árbol era representado por un árbol perennifolio durante el final del invierno, para simbolizar el nacimiento del dios del Sol, Frey, y con él el resurgimiento de la vida sobre la Tierra. Una vez evangelizados, estos pueblos nórdicos sustituyeron su dios pagano por Jesucristo y continuaron conmemorando su nacimiento del mismo modo.

Hay leyendas que afirman que el primer árbol navideño fue talado por San Bonifacio (680-754), uno de los evangelizadores de la actual Alemania, para destruir un símbolo nórdico vinculado con Thor, y que en su lugar plantó un pino para que su verdor eterno recordase a los germanos de la presencia inmortal de Jesucristo. Pero no son pocas las leyendas en torno al origen del árbol navideño, y resulta difícil comprobar su veracidad.

Del modo que sea, la tradición del árbol de Navidad comenzó a formar parte de los ritos cristianos navideños en épocas muy recientes. Se piensa que los primeros en hacerlo fueron los alemanes, alrededor del siglo XVII, y que la tradición se instaló en Finlandia, Bohemia, Moravia, Inglaterra y España a lo largo del siglo XIX. En el siglo XX, esta tradición se extendió por gran parte del mundo, de la mano de las celebraciones comerciales navideñas, inspiradas en especial por la cultura estadounidense.

¿Qué día se pone el árbol de Navidad?

La tradición navideña dicta que el árbol de Navidad debe colocarse (“armarse” o “montarse” en algunos países) el 8 de diciembre, día de la Inmaculada Concepción. Fue establecido así por el papa Pío IX en 1854, y ese mismo día debe colocarse el pesebre en la casa, aunque la figurilla del niño Jesús no debe estar en él todavía.

Sin embargo, en muchos países esta fecha puede variar; en algunos casos no existe ningún consenso respecto a cuándo poner el árbol. En otros casos, como en ciertos países protestantes, se hace el primer domingo de Adviento, una fecha que varía de un año a otro, y que debe ser el cuarto domingo previo a la Navidad.

Elementos del árbol de Navidad

El árbol de Navidad suele contar con una decoración muy frondosa, que implica elementos como los siguientes:

• Estrella. Está ubicada generalmente en la cima del árbol navideño y remite en el imaginario cristiano a la estrella de Belén, que guió a los tres Reyes Magos hacia el cobertizo en el que nació el mesías, Jesús de Nazaret. Generalmente es de gran tamaño y puede ir acompañada de réplicas más pequeñas que se ubican en las ramas, como adornos ordinarios.
• Esferas. Generalmente son bolas de colores brillantes y metalizados, que cuelgan de un hilo y así penden de las ramas del árbol, como si fueran frutos. Estos adornos pueden remitir a la manzana del relato bíblico del Jardín del Edén, o bien consistir en símbolos de abundancia, fertilidad y una primavera fecunda.
• Lazos. Tradicionalmente se han interpretado como símbolos de la unión familiar y del amor eterno, por lo que es costumbre incluirlos entre los adornos del árbol navideño. La idea es que representen la unión estrecha del afecto.
• Luces. Son su adorno más común y por lo general consisten en uno o varios tendidos de bombillos pequeños de colores, que pueden permanecer fijos o encenderse y apagarse por oleadas. En algunos casos incluso traen consigo pequeñas cajas electrónicas de música navideña.
• Figurines. Son adornos con formas navideñas determinadas: muñecos de nieve, renos, Papá Noel, trineos, etcétera. Su rol es completar el decorado al colgar de las ramas del árbol.
• Otros adornos. En ocasiones el árbol navideño puede también incluir falsa nieve, guirnaldas, escarcha y otros adornos que realzan su brillo y lo llamativo de su aspecto.

Otros adornos de Navidad

Además del árbol de Navidad, son típicos adornos navideños:

• El pesebre. Es una representación en miniatura del lugar en que nació Jesús de Nazaret: un cobertizo o cabaña de los animales, rellena de paja y en la que no solo estaban María y José, padres del niño Jesús, sino también una mula, un buey y a veces otros animales domésticos (como ovejas o vacas). Todo ello, junto a los Tres Reyes Magos y al ángel de la anunciación, suele aparecer en los pesebres, que se decoran de distintas maneras en las casas al llegar la época navideña.
• Pirámide de Navidad. Típica de las regiones de Alemania y la República Checa, entre otras, se trata de una especie de torre decorada con luces y adornos, en la cual gira un pequeño carrusel de madera, coronado por una hélice en la parte superior que moviliza el conjunto gracias al calor de cuatro velas encendidas debajo de ella.
• Papá Noel. También llamado Santa Claus, Viejo Pascuero o San Nicolás, se trata de un ícono navideño vinculado con la entrega de regalos (sobre todo a los niños), creado a partir de la figura de San Nicolás de Bari, un obispo cristiano de origen griego del siglo IV. Es común en Navidad que su imagen, vestida de rojo y con una larga barba blanca, aparezca por doquier arrastrando un saco de obsequios, o a cargo de un trineo tirado por renos.
• Las botas navideñas. Son botas rojas y blancas que se suelen colgar de paredes y puertas en rememoración de los tiempos en los que el obsequio de Nochebuena se les dejaba a los niños en su interior, a modo de sorpresa.

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Referencias

• “Árbol de navidad” en Wikipedia.
• “Decoración navideña” en Wikipedia.
• “Árbol de Navidad: de dónde proviene la tradición y por qué se arma el 8 de diciembre” en Clarín (Argentina).
• “History of Christmas Trees” en History.com.
• “Christmas Tree (holiday decoration)” en The Encyclopaedia Britannica.