Burguesía

Te explicamos qué es la burguesía y cómo surgió esta clase social. Además, cuáles son los valores burgueses y los tipos de burguesía.

¿Qué es la burguesía?

La burguesía es la clase social propietaria de los medios de producción en una sociedad capitalista. Como tal, concentra el poder económico y, en algunos casos, también el poder político.

Desde una perspectiva marxista, se la considera una clase antagónica respecto a la clase obrera, esta última desprovista de los medios de producción y obligada a vender su fuerza de trabajo. En un sentido más tradicional, el término hace referencia a la clase media acomodada, dueña de comercios, fábricas o industrias, que desde la Edad Media se diferenció tanto de los sectores asalariados como de la nobleza hereditaria.

El término “burguesía” proviene del francés bourgeoisie, que designa al conjunto de los burgueses. Por su parte, el vocablo “burgués” surgió en la Edad Media para nombrar a una nueva clase social urbana, los habitantes de los burgos, es decir, las partes nuevas de una ciudad medieval o los barrios que se establecían junto a un cruce de caminos o a un castillo. Estos burgueses no eran ni señores feudales (nobles o clérigos) ni siervos o campesinos, sino comerciantes, artesanos y prestamistas, cuya posición económica y jurídica les permitía ocupar un peldaño intermedio dentro de la sociedad medieval.

La aparición y el crecimiento de la burguesía en Occidente marcó el paso de la era feudal a la Edad Moderna, cuando su poder económico comenzó a entrar en conflicto con el poder político detentado por la nobleza del Antiguo Régimen (es decir, en las monarquías absolutistas). Entre fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, se produjeron las primeras revoluciones burguesas contra el orden monárquico y aristocrático, como la Revolución francesa de 1789, que dio inicio a la Edad Contemporánea, o la independencia de Estados Unidos en 1776, que llevó a la formación del primer régimen republicano moderno. La burguesía también impulsó la Revolución Industrial a partir de mediados del siglo XVIII y se consolidó como clase políticamente dominante en el siglo XIX.

Ver también: Comunismo científico

La burguesía según el marxismo

De acuerdo con el pensamiento marxista, la burguesía ocupa un lugar dominante en la estructura de producción del capitalismo, ya que los burgueses son los dueños de los medios de producción (fábricas, talleres)y obtienen su riqueza de la explotación de la fuerza de trabajo del proletariado.

Estas relaciones de producción permiten fabricar bienes o brindar servicios de cuya venta los burgueses obtienen ganancias, pues retribuyen a los trabajadores con un salario mensual pero se apropian de la plusvalía (es decir, la parte del valor de un bien o servicio que no es pagada al trabajador).

Dada la influencia del marxismo en las ciencias sociales del siglo XX, los términos “burgués” y “burguesía” se emplean muchas veces con el sentido formulado por Karl Marx (1818-1883). Sin embargo, las formas de organización social y laboral de la actualidad presentan un nivel de complejidad que no estaba contemplado en la obra de Marx, quien se limitaba a analizar la sociedad del siglo XIX, por lo que muchos investigadores prescinden de estos conceptos o de los enunciados del marxismo.

En algunos casos, los términos “burgués” y “burguesía” se usan con un sentido peyorativo, como sinónimos de explotador y de persona acomodada o privilegiada.

Ver además: Marxismo

¿Cómo surgió la burguesía?

La burguesía surgió en Europa en la Plena Edad Media, entre los siglos XI y XIII, pero adquirió mayor notoriedad a partir de la Baja Edad Media, entre los siglos XIV y XV. Los burgueses o habitantes de los burgos eran personas libres que no gozaban de los privilegios de la nobleza hereditaria pero tampoco estaban sometidas al orden feudal ni a las relaciones de servidumbre. Se dedicaban a la producción artesanal, al comercio y a las finanzas.

La burguesía fue ganando importancia gracias a la acumulación de capitales y propiedades, lo que a menudo significó que muchas familias burguesas se ennoblecieron (mediante la compra de títulos de nobleza), se convirtieron en grandes prestamistas e incluso accedieron a cierto poder político local, sobre todo en las ciudades-Estado de la época, como Venecia o Florencia. La clave para ello fue que no se encontraban sujetas a la jurisprudencia feudal, pues constituían una clase social relativamente nueva.

Durante la Edad Moderna, la decadencia del modelo feudal, la competencia comercial entre las naciones derivada del mercantilismo y la expansión de los imperios europeos contribuyeron a un mayor enriquecimiento de las burguesías. Los nuevos valores burgueses y republicanos terminaron suplantando a los valores de la nobleza y derribando el modelo absolutista del Estado, que concentraba el poder político en la monarquía hereditaria. Esto se logró en parte gracias a la Revolución Industrial, iniciada a mediados del siglo XVIII en Inglaterra, que fortaleció la posición económica de la burguesía industrial, comercial y financiera. Sin embargo, el motor del cambio fueron las revoluciones burguesas de finales del siglo XVIII y el siglo XIX.

En la Revolución francesa de 1789, la burguesía lideró el llamado tercer estado, integrado por todos los sectores que no tenían privilegios aristocráticos, y consiguió conquistar el poder político. Esta posición se consolidó gracias a las revoluciones europeas del siglo XIX. También en Estados Unidos se impuso, desde la declaración de la independencia en 1776, un régimen inspirado en las ideas de la Ilustración y el liberalismo, promovido por políticos e intelectuales burgueses.

A lo largo del siglo XIX, la burguesía se consolidó como la clase dominante en casi todo el mundo, no solo en el ámbito económico sino también en el político. La nobleza empobrecida a menudo necesitaba del soporte financiero de la burguesía y esta aspiraba a obtener el estatus reservado a los nobles y el control del Estado, por lo que terminó configurándose un mundo dominado por la burguesía.

Este orden burgués condujo a un antagonismo entre los intereses de la burguesía y los del proletariado, lo que desencadenó una serie de conflictos sociales y políticos durante la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX, interpretados como una lucha de clases por el marxismo y otras corrientes socialistas.

¿Cuáles son los valores burgueses?

El surgimiento y la expansión de la burguesía introdujeron nuevos valores culturales en Occidente, expresados durante la Revolución francesa con el lema “libertad, igualdad, fraternidad”. Sobre estos valores se construyeron los nuevos regímenes políticos constitucionales y republicanos a partir de finales del siglo XVIII.

Estos valores provienen en gran medida de los aportes morales e intelectuales de la Ilustración y el liberalismo, e incluyen lo siguiente:

• Los derechos y las garantías individuales que corresponden a todos los ciudadanos, como la libertad religiosa, de prensa, de expresión, de reunión y de asociación, basadas en la defensa del individuo frente al poder del Estado.
• El respeto de la propiedad privada y de la libertad de empresa como fundamentos de la libertad individual y la prosperidad económica.
• El estado de derecho, es decir, la organización del Estado sobre una base legal que garantiza los derechos individuales y evita los abusos de poder, como la división de los poderes públicos (ejecutivo, legislativo y judicial), la promulgación de la igualdad ante la ley de todos los ciudadanos y la redacción de una Constitución nacional.
• La movilidad social, que en teoría le permite a cualquier individuo ascender o descender en la escala social con base en su esfuerzo y sus méritos económicos o intelectuales, y no en su sangre, linaje o pertenencia a un estrato social.

Tipos de burguesía

A grandes rasgos, la burguesía se divide en distintas categorías según los criterios de análisis empleados:

• Alta burguesía. Es el sector más importante y enriquecido de la burguesía, que suele constituir la llamada “clase alta” de la sociedad, es decir, la élite adinerada, que en muchos sentidos se comporta como una nueva aristocracia e influye en la política.
• Pequeña burguesía. Es un sector intermedio entre la alta burguesía y el proletariado, conformado por pequeños comerciantes, profesionales, artesanos o empresarios que no emplean (o emplean muy poca) mano de obra asalariada y no acumulan grandes sumas de capital.
• Burguesía ilustrada. Se suele llamar así a un sector de la burguesía surgida en los siglos XVIII y XIX que cultivó los valores de la cultura, las artes y la educación, influido por los ideales de la Ilustración. En ocasiones se usa el término para aludir también a la clase media universitaria o artística.
• Burguesía industrial. Es el sector de la burguesía que se dedica a la producción de bienes y servicios en fábricas y empresas, y cuya riqueza y posición social se consolidaron a partir de la Revolución Industrial.
• Burguesía comercial. Es el sector de la burguesía que se dedica al intercambio comercial de bienes y servicios, y cuyas ganancias se deben a su rol como intermediario entre los productores y los consumidores.
• Burguesía financiera. Es el sector de la burguesía que se dedica a las finanzas, como la gestión bancaria, la bolsa, la concesión de préstamos, las inversiones y la especulación financiera.
• Burguesía agraria. Si bien la burguesía estuvo en sus orígenes vinculada a la vida urbana, a menudo se usa este término para designar a los terratenientes y grandes productores agrícolas.

Ver además:

Referencias

• Bobbio, N., Matteucci, N. y Pasquino, G. (Dirs.). (2015). Diccionario de política. Siglo XXI.
• Ryan, A. (2024). Bourgeoisie. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com/
• Wilczynski, J. (1981). Bourgeoisie. En J. Wilczynski, An Encyclopedic Dictionary of Marxism, Socialism and Communism (p. 48). Macmillan Reference Books.