Nación

Te explicamos qué es una nación y cuáles son sus elementos y características. Además, la relación entre nación y Estado, y algunos ejemplos.

¿Qué es una nación?

Una nación es una comunidad política con un gobierno propio, cuyos miembros comparten un sentido de identidad y pertenencia que los diferencia de los individuos de otras naciones. Cuenta con un territorio que considera propio y que suele recibir el nombre de país.

La nación así entendida describe a los Estados-nación contemporáneos. Estos surgieron en la segunda mitad del siglo XVIII, con la Revolución francesa de 1789, que derrocó al absolutismo del Antiguo Régimen y dio origen al nacionalismo, una ideología basada en la pertenencia a una nación.

De este modo, el principio absolutista, que considera que la soberanía reside en el rey, fue sustituido por el concepto de soberanía nacional, que afirma que la soberanía reside en el pueblo o la nación. Por lo tanto, si antes el rey era el Estado, ahora el Estado pasa a estar constituido por la nación, es decir, por el conjunto de los ciudadanos.

En ocasiones, el concepto de nación adquiere un sentido más cultural que político, y puede hacer referencia a un pueblo o una comunidad que tiene una determinada identidad étnica, lingüística, cultural o histórica, aunque no tenga un Estado propio. En este caso, se considera que varias naciones pueden estar integradas en un mismo Estado (por ejemplo, las etnias indígenas que forman parte del Estado Plurinacional de Bolivia) o que una nación puede aspirar a construir su propio Estado independiente.

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Elementos de una nación

Cada nación se compone de los siguientes elementos:

• Población. Una nación está conformada principalmente por un conjunto de personas que se reconocen como parte de una comunidad nacional. En este sentido, no existe una nación sin una población que hable una lengua, que comparta una historia, que habite un territorio, que tenga unas costumbres y unas prácticas culturales comunes, y que reconozca a un gobierno y obedezca sus leyes.
• Territorio. Toda nación posee un territorio al que sus habitantes consideran su patria. En algunos casos, un pueblo puede reclamar su derecho a un territorio que no posee, pero que interpreta como propio por una razón histórica o geográfica. En el caso de las poblaciones nómades, como algunas tribus saharianas, si bien no ocupan un territorio fijo, suelen ser clasificadas como naciones debido a su nivel de integración cultural.
• Lengua. Toda nación posee una lengua oficial, que es la que se usa en su gobierno, su burocracia, su código jurídico y sus documentos públicos, y con la que su población se identifica. En algunos casos, la población habla otras lenguas además de la oficial; por ejemplo, en una comunidad indígena se suelen hablar la lengua oficial y la lengua familiar. Así también, a veces se reconocen como oficiales varias lenguas, como el español y el guaraní en Paraguay.
• Gobierno. Toda nación tiene un gobierno, ya sea que se gobierne a sí misma (según el principio del Estado-nación) o que se reconozca como un pueblo que participa en un gobierno común junto con otras naciones (es el caso de los Estados plurinacionales). El gobierno administra el Estado, impone el código jurídico y ejerce el poder político en nombre del pueblo en el territorio nacional. Algunos pueblos que se identifican como naciones desde un punto de vista étnico no tienen un Estado y un gobierno propios (como los kurdos).

Características de una nación

Las naciones son comunidades políticas, conformadas por personas que se consideran parte de una misma colectividad por habitar un mismo territorio, compartir una lengua, una historia y unas costumbres, o estar bajo la autoridad de un mismo gobierno. Según el politólogo irlandés Benedict Anderson (1936-2015), las naciones son “comunidades imaginadas” que ofrecen a los ciudadanos una sensación de pertenencia a un conjunto mayor, a pesar de que no conocen a todas las personas que forman parte de él.

Las naciones no existieron siempre. Son construcciones sociales, culturales e históricas mediante las cuales las sociedades lograron organizarse en grupos numerosos. Este proceso implicó que se diferenciaran de otros grupos sociales o naciones. En este sentido, la identidad nacional se basa tanto en la pertenencia a una nación como en la identificación de quienes no forman parte de ella como extranjeros.

En la actualidad, el término “nación” se comprende de dos modos distintos, cada uno con sus propias características:

• Nación política. Es el conjunto de los ciudadanos de un país, que se consideran los titulares de la soberanía y cuyos representantes en el gobierno se encargan de administrar el Estado, promulgar y hacer cumplir las leyes, e impartir la justicia.
• Nación cultural. Es el conjunto de las personas que se identifican como parte de una etnia o un pueblo porque comparten una lengua, una religión, una tradición, una identidad étnica o una historia común, independientemente de que tengan o no un Estado propio.

Nación y Estado

La nación y el Estado no son sinónimos. La nación es el conjunto de los habitantes de un país soberano, que suelen reconocerse como parte de una misma comunidad con una identidad compartida. En cambio, el Estado es la organización política y administrativa de la nación, es decir, el conjunto de las instituciones que hacen posible el ejercicio de la soberanía nacional dentro de un territorio determinado, de acuerdo con un marco jurídico establecido.

De este modo, los Estados son el ordenamiento político, jurídico y administrativo de un país soberano. Las naciones, por su parte, son la población y el territorio sobre el que se ejerce la autoridad del Estado o, en las definiciones más culturales, la colectividad étnica que puede o no tener su propio Estado.

Así, puede haber Estados-nación, en los que los límites del Estado coinciden con los de la nación; y Estados sin nación, que tienen una estructura política soberana pero carecen de una población con una identidad cultural propia (como la Ciudad del Vaticano). Así también, puede haber naciones que no tienen un Estado propio y que forman parte activa de un Estado plurinacional (como Bolivia) o que aspiran a alguna forma de Estado propio (como la nación kurda).

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Ejemplos de nación

Algunos ejemplos de nación son los siguientes:

• Nación francesa. Como muchos otros países, Francia es un Estado-nación cuyos ciudadanos comparten la nacionalidad francesa. La identidad nacional se expresa en una serie de símbolos, como la bandera tricolor y el himno nacional (La Marsellesa), y en el reconocimiento de sus ciudadanos como franceses con igualdad de derechos, independientemente de su origen étnico o geográfico.
• Nación kurda. Los kurdos son un pueblo de lengua irania que habita el Kurdistán, una zona montañosa cuya soberanía se reparte entre los Estados de Siria, Turquía, Irak e Irán. Aunque se identifican a sí mismos como una etnia y una nación, no poseen un Estado propio y, por lo tanto, no tienen capacidad de autodeterminación, pues están sometidos a las autoridades de los cuatro Estados que dominan la región.
• Nación judía. Durante miles de años, el pueblo judío fue un pueblo apátrida, es decir, carente de un territorio nacional propio, por lo que sus integrantes habitaban en diferentes Estados, muchas veces tratados como extranjeros. Sin embargo, conservaron un fuerte arraigo en su identidad, construida con base en la práctica de la religión judía y en el reconocimiento de una pertenencia étnica e histórica. Actualmente, si bien hay judíos de diferentes nacionalidades, pues su identidad es compatible con la pertenencia a un Estado-nación, existe un Estado específicamente judío, el Estado de Israel, en el que también habitan personas de otras religiones y etnias.
• Naciones indígenas de Bolivia. El Estado Plurinacional de Bolivia es un país soberano, que reconoce como bolivianos a todos sus ciudadanos pero, al mismo tiempo, considera que los pueblos indígenas son naciones con derecho a la libre determinación. De este modo, se trata de un Estado compuesto por múltiples naciones indígenas, como son los aymaras, los quechuas, los yuracarés, los canichanas y los guaraníes, entre otros, además de los afrobolivianos y otras comunidades. Las lenguas oficiales de Bolivia son el español y las distintas lenguas indígenas.

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Referencias

• Anderson, B. (1993). Comunidades imaginadas. Reflexiones sobre el origen y la difusión del nacionalismo. Fondo de Cultura Económica.
• Bobbio, N., Matteucci, N. y Pasquino, G. (Dirs.). (2015). Diccionario de política. Siglo XXI.
• Feinstein, Y. (2024). Nation-state. Encyclopedia Britannica. https://www.britannica.com
• Gellner, E. (2008). Naciones y nacionalismo. Alianza.