Año bisiesto

Te explicamos qué es un año bisiesto, cada cuánto ocurre y cuál es su origen. Además, distintas creencias populares sobre el año bisiesto.

Calendario resaltando en rojo el 29 de Febrero
El año bisiesto es un año que tiene 366 días. [Imagen: mitifoto].

¿Qué es un año bisiesto?

Un año bisiesto es un año que tiene un día más que el año común, por lo tanto tiene 366 días en total. Este día extra se agrega al mes de febrero, que pasa a tener 29 días en vez de 28. Esto ocurre cada cuatro años, con algunas excepciones.

El año bisiesto es necesario para mantener el calendario en sincronía con el año solar, que es el tiempo que tarda la Tierra en dar una vuelta completa alrededor del Sol. Este período es de aproximadamente 365,242 días. Sin embargo, nuestro calendario anual es de 365 días, por lo que se genera un desfase de alrededor de 0,242 días (aproximadamente 6 horas) cada año.

Con el sistema del año bisiesto, se compensa este tiempo extra y se evita que las estaciones del año se desajusten con el calendario por el desfase acumulado.

El sistema del año bisiesto no es completamente exacto y es necesario realizar ajustes adicionales. Por eso, los años divisibles entre 100 no son bisiestos, a menos que también sean divisibles entre 400. Aún así, los años bisiestos siguen siendo una forma práctica de mantener el calendario en equilibrio con el ciclo solar.

Origen del año bisiesto

El origen del año bisiesto se encuentra en el calendario que implementó el líder romano Julio César en el año 45 a. C., en la antigua Roma. Previamente, el sistema de fechas romano estaba basado en un calendario lunar que causaba desajustes con el año solar. Para resolver este problema, Julio César encargó al astrónomo Sosígenes de Alejandría la creación de un calendario basado en el movimiento solar.

Entre las modificaciones que introdujo el calendario juliano, se estableció el año bisiesto para compensar la diferencia entre los 365 días en los que se dividía el año del nuevo calendario y los 365,242 días del año solar. Esto significaba que cada cuatro años, el mes de febrero tenía 29 días en lugar de 28.

Aunque el calendario juliano mejoró la precisión en comparación con el calendario lunar, todavía presentaba un pequeño desfase a lo largo del tiempo. Este desajuste fue corregido más tarde con la reforma del calendario gregoriano, implementada en 1582 d. C. por el papa Gregorio XIII. Con ella se estableció el sistema actual, en el que los años divisibles entre 100 no son bisiestos, a menos que también sean divisibles entre 400.

El día especial del año bisiesto

El 29 de febrero es el día que se añade en los años bisiestos para corregir la diferencia entre el año calendario y el año solar. Aunque es solo un día adicional, tiene un carácter especial.

Las personas nacidas en esta fecha son conocidas como leaplings o leap day babies por el nombre de año bisiesto en inglés (leap year). Estas personas solo pueden celebrar el día real de su cumpleaños una vez cada cuatro años. En los años no bisiestos, deben optar por celebrarlo el 28 de febrero o el 1 de marzo.

Además, el 29 de febrero tiene un aura de misterio, ya que representa un momento extra en el tiempo, algo que no ocurre en el resto de los años.

Creencias sobre el año bisiesto

A lo largo de la historia, el concepto del año bisiesto estuvo asociado a diferentes creencias populares. Por ejemplo, existe una leyenda según la cual en Europa medieval, el 29 de febrero, las mujeres podían proponer matrimonio a los hombres, algo que rompía con las normas sociales de la época.

En algunas culturas, los años bisiestos eran asociados con la fortuna, sea como buena suerte o como mal augurio. Se creía que los años bisiestos traían cambios importantes o eran propicios para eventos extraordinarios a nivel personal, como mudanzas o la creación de nuevos negocios.

En astrología, también se considera que los nacidos el 29 de febrero tienen una energía astrológica especial y que pueden tener características de personalidad inusuales o poderosas, por haber nacido un día raro, que ocurre solo una vez cada cuatro años.

Otros tipos de años

Además del año bisiesto, hay otros términos que se utilizan para medir diferentes períodos de tiempo o incluso distancias. Por ejemplo:

  • Año solar. Es el tiempo que tarda la Tierra en dar una vuelta completa alrededor del Sol, aproximadamente 365,242 días. Es la base para la medición del tiempo en la mayoría de los calendarios. El año solar se ajusta mediante el sistema de años bisiestos para mantener las estaciones alineadas con el calendario.
  • Año lectivo. Se refiere al período de tiempo en el que se imparten clases en una institución educativa. Generalmente, comienza en otoño y termina a principios del verano, dependiendo del país y del calendario escolar específico.
  • Año natural o año calendario. Es el período de 365 días (o 366 en un año bisiesto) que comienza el 1 de enero y termina el 31 de diciembre. Es el año del actual calendario gregoriano y es el que usamos para medir el tiempo en la vida cotidiana.
  • Año comercial. Es el período de 360 días utilizado en algunas áreas de negocios y finanzas, dividido en doce meses de 30 días. Este tipo de año se usa para simplificar el cálculo de intereses, rentas o ganancias en las transacciones financieras.
  • Año fiscal o financiero. Es el período de doce meses que una empresa o entidad utiliza para sus informes financieros y cálculos impositivos. Puede no coincidir con el año calendario. Por ejemplo, en algunos países, el año fiscal va del 1 de abril al 31 de marzo del año siguiente.
  • Año sabático. Es un período de descanso o interrupción temporal en las actividades laborales o académicas. Hay personas que lo toman cada varios años y lo usan para viajar, estudiar, hacer investigación o simplemente descansar.
  • Año luz. Es una unidad de medida de distancia utilizada en astronomía. Equivale a la distancia que la luz recorre en un año, es decir, aproximadamente 9,46 billones de kilómetros (o 5,88 billones de millas). Se usa para medir distancias astronómicas debido a la inmensidad de los espacios entre cuerpos celestes.

Sigue con:

Referencias

  • Gutiérrez, S. (2008). Nuestro calendario: una medida de gran precisión. Suma, (58), 87-92. https://revistasuma.fespm.es
  • Llagostera Cuenca, E. (2007). La medición del tiempo en la Antigüedad: el calendario egipcio y sus “herederos”, el Juliano y el Gregoriano. UNED. Espacio, Tiempo y Forma. Serie II, Historia Antigua, (19-20), 61-76.
  • Vicente, J. J. (2010). Breve historia del calendario. Astronomía, 69-86. Universidad de Granada.

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Kiss, Teresa (8 de enero de 2025). Año bisiesto. Enciclopedia Concepto. Recuperado el 8 de enero de 2025 de https://concepto.de/ano-bisiesto/.

Sobre el autor

Última edición: 8 de enero de 2025
Revisado por Teresa Kiss
Profesorado de Enseñanza Media y Superior en Historia (Universidad de Buenos Aires)

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