Estructura de un texto

Te explicamos qué es la estructura de un texto y cuáles son sus partes. Además, qué tipos de estructuras textuales hay y ejemplos.

¿Qué es la estructura de un texto?

La estructura de un texto es el modo en que sus partes se encuentran dispuestas. Esto depende casi siempre del tipo de texto que se produce, ya que el autor tendrá en mente un cometido final diferente si lo que escribe es un relato, un ensayo o un reportaje periodístico.

Estructura de un texto expositivo

Los textos expositivos son aquellos en los que se busca transmitir información de una manera objetiva a través de explicaciones,es decir, sin asumir una postura frente a lo dicho y sin opinar ni favorecer ninguna interpretación o punto de vista. Son ejemplos de textos expositivos los artículos periodísticos, las entradas de enciclopedia y los libros de texto escolar.

Los textos de tipo expositivo se rigen normalmente por la siguiente estructura básica: introducción, desarrollo y conclusiones.

Introducción

La introducción es la parte inicial del texto, que busca adentrar al lector en el tema a través de información que va desde lo más general hacia lo más específico. Dicha información debe allanarle el camino para que comprenda lo que sigue, construyendo un marco de referencia y dejándole en claro las ideas básicas que necesitará para más adelante.

Por ejemplo, en un artículo enciclopédico sobre el arte egipcio, la introducción explicará quiénes fueron los egipcios, en qué momento de la Antigüedad tuvieron su apogeo cultural y cuáles eran los rasgos principales de su cultura.

Desarrollo

El desarrollo es la parte de mayor densidad del texto, en la que se exponen las ideas más importantes y se aborda de lleno el tema en cuestión. Es común que en esta etapa se eche mano de ejemplos, citas de especialistas o incluso gráficos y otros materiales que ayuden a ilustrar lo dicho.

Por ejemplo, en el texto sobre el arte egipcio, el desarrollo abordará lo central del tema, yendo de lo más sencillo a lo más complicado y apoyándose en ilustraciones, fotografías y descripciones de piezas fundamentales.

Conclusiones

La conclusión es la etapa final del texto, que sirve de cierre a la exposición y ofrece información adicional. Esto puede significar relacionar el tema con otros asuntos relevantes o retomar partes de lo dicho en las que es conveniente insistir. Lo importante es plantear aquí las ideas finales con las que se desea que el lector se quede.

Por ejemplo, el artículo sobre arte egipcio cerraría mencionando la relevancia de este para los cánones occidentales y resumiendo algunos de sus rasgos destacados que puedan dar cuenta de ello.

Más en: Texto expositivo

Estructura de un texto argumentativo

Los textos argumentativos son aquellos en los que se construye un punto de vista respecto al tema en cuestión, a través del uso de argumentos, ejemplos o datos, todo puesto al servicio de convencer al lector de que interprete las cosas tal y como se le propone. Son ejemplos de textos argumentativos las columnas de opinión en los diarios, los editoriales periodísticos y los discursos políticos.

Los textos de tipo argumentativo se rigen normalmente por la siguiente estructura básica: tesis, argumentación y conclusiones.

Tesis

La tesis es la parte inicial del texto, donde se deja en claro la posición del autor respecto al tema. Para ello, es posible contar con una brevísima parte introductoria, con el propósito de brindar cierto contexto, pero lo más importante es esbozar las premisas fundamentales que se defenderán más adelante a través de argumentos.

Por ejemplo, en el caso de un artículo de opinión en contra del gobierno, el autor puede empezar planteando el aspecto más grave de la actualidad política, que considera entera responsabilidad del gobierno y que amerita un cambio de presidente.

Argumentación

La argumentación es la parte central de los textos argumentativos. Una vez expuestas las premisas fundamentales del punto de vista, corresponde sustentarlas o defenderlas. Se debe ofrecer al lector razones que apoyen o demuestren lo dicho y tratar de convencerlo de compartir el punto de vista expuesto. Esto también puede lograrse exponiendo razones que refuten las posibles objeciones al planteamiento inicial.

Por ejemplo, en el artículo de opinión en contra del gobierno, el autor podría defender su punto de vista citando las promesas incumplidas del presidente, mencionando lo que establece la ley al respecto, explicando cómo se han atendido situaciones similares en otros países o cómo lidiaron con ellas gobiernos anteriores.

Conclusiones

La parte final del texto argumentativo es clave para dejar la impresión adecuada en el lector. En ella, se establecen las conclusiones lógicas de las premisas anteriores, enfatizando el modo en que, según el autor, se deben interpretar. Se trata de un apartado generalmente breve y que va al grano, donde se da al lector un punto de vista final explícito, con el que se busca que se quede al terminar de leer.

Por ejemplo, el artículo de opinión en contra del gobierno culminaría explicando que, en función de todo lo anterior, no quedan dudas respecto de la responsabilidad del gobierno y que, por lo tanto, lo mejor sería cambiarlo.

Ver también: Estructura de un texto argumentativo

Estructura de un texto narrativo

Los textos narrativos son aquellos en los que se cuenta una historia o un relato que puede ser de distinta extensión y naturaleza, empleando recursos estilísticos o literarios para embellecerlo o para generar un mayor impacto. Son ejemplos de textos narrativos las novelas, las crónicas periodísticas y los relatos infantiles.

La estructura fundamental de los textos narrativos es la sugerida por el filósofo griego Aristóteles (384-322 a. C.) en su Poética y consta de tres partes: inicio o planteamiento, nudo o complicación y desenlace.

Inicio o planteamiento

El planteamiento es la parte inicial de todo relato y consiste en la presentación de los personajes, el lugar en el que ocurre la historia y la información general que establece el punto de partida. Una vez planteada la situación inicial, el lector debería saber lo necesario para comprender lo que sigue.

Por ejemplo, un cuento sobre un grupo de soldados que regresan de la guerra podría empezar presentando al narrador y, a través de él, a sus compañeros, que viajan a su lado en el barco de regreso del extranjero.

Nudo o complicación

El nudo es el punto central de todo relato y se caracteriza por la aparición de obstáculos en el camino del protagonista, es decir, la complicación del hilo de la trama. Este es el momento en que las cosas se le ponen difíciles al personaje o en que aparecen los antagonistas.

Por ejemplo, en el relato de los soldados, el nudo podría contar los contratiempos del barco en su camino a casa o la pelea entre el protagonista y uno de sus compañeros, lo cual podría enturbiar el retorno.

Desenlace

En la parte final del relato, se resuelve el conflicto y la trama alcanza su fin. Normalmente, este segmento evidencia un cambio sufrido por el personaje, ya sea con un final trágico o feliz.

Por ejemplo, el relato de los soldados podría culminar con el antagonista cayendo al agua durante la pelea, marcando así un final trágico, o llegando y reencontrándose con sus seres queridos, en un final feliz.

Ver también: Texto narrativo

Estructura interna del texto

En algunos tipos textuales, es posible identificar tres formas de organización interna del texto, es decir, de estructura interna. Cada una de estas formas refleja una estrategia de cara al lector, mediante la cual se le presenta la información de la manera más adecuada posible según los objetivos que se persiguen.

Las formas de organización interna o estructura interna son la deductiva, la inductiva y la circular.

Estructura deductiva

La estructura deductiva es aquella que organiza la información de lo más general a lo más específico, razón por la cual lo más importante se encuentre enunciado primero y durante el resto del contenido se vuelve a ello para analizarlo, discutirlo, razonarlo o dar ejemplos. Este tipo de estructura es ideal para exponer de manera paulatina y detallada una serie de informaciones nuevas respecto a un tema.

Por ejemplo, en un texto explicativo sobre una guerra mundial, se enunciará primero lo ocurrido y luego se analizarán sus causas, sus consecuencias y otros hechos relevantes.

Más en: Deducción

Estructura inductiva

La estructura inductiva es aquella que organiza la información de manera contraria a la deductiva, es decir, de lo particular a lo general, razón por la cual el grueso del contenido importante suele quedar hacia el final del texto. Es el caso de textos que abordan un tema general a partir de una anécdota que sirve de ejemplo.

Por ejemplo, un texto sobre la calidad de vida en un país puede comenzar con un retrato de la situación de los jubilados, para marchar luego hacia el panorama general de la economía.

Más en: Inducción

Estructura circular

La estructura circular es aquella que organiza el texto de manera poco convencional, dejando al inicio y al final los segmentos de mayor importancia, normalmente para generar contrastes o contraposiciones entre dos perspectivas centrales. En estos casos, los argumentos iniciales y los finales suelen hacer referencia mutua.

Aunque el uso de la estructura circular es menos frecuente, un ejemplo podría ser un texto en el que se comparen las propuestas de dos candidatos electorales. Se expondría primero la diferencia central entre las propuestas, luego se le ofrecería al lector el detalle de unas y otras, y finalmente se volvería al punto inicial para cotejar en profundidad todas las diferencias y similitudes.

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Referencias

• Clavel Lledó, E. (1984). Iniciación al análisis de textos. Estructuras y tipos de escritos. Teide.
• Fuentes Rodríguez, C. (1996). Aproximación a la estructura del texto. Librería Ágora.