Índice
Te explicamos qué es un argumento, qué tipos existen y su estructura. Además, cómo formular un argumento y algunos ejemplos.

¿Qué es un argumento?
Un argumento es la expresión de un razonamiento que busca probar o refutar una idea, tesis o proposición, a través de un conjunto de conclusiones asociadas. Se trata de una forma razonada de convencer a los demás de un punto de vista.
La argumentación consiste en tender un nexo entre ciertas premisas y ciertas conclusiones, cuya validez dependerá del procedimiento lógico que ofrezcan. Los argumentos deben ser coherentes y consistentes, es decir, no deben contradecirse a sí mismos, ni deben carecer de estructura formal (o sea, no pueden tener “vacíos” lógicos).
Los argumentos forman parte de los discursos y las opiniones que se expresan en la vida cotidiana. No siempre son válidos o convenientes, por lo que no siempre tendrán éxito en su cometido. A aquellos razonamientos que en apariencia parecen válidos, pero en el fondo no lo son, se les conoce como falacias.
Etimología de “argumento” La palabra “argumento” proviene de las voces latinas arguere (“dejar en claro”) y mentum (sufijo que expresa uso o instrumentalidad). Comparte origen con el verbo argüir, que significa “razonar a favor o en contra de algo”, es decir, “argumentar”.
Tipos de argumentos
Dependiendo de su contenido y sus procedimientos lógicos, es posible identificar distintos tipos de argumentos:
Argumentos deductivos
Los argumentos deductivos son aquellos que parten de premisas seguras o probables y extraen conclusiones seguramente válidas de ellas, yendo siempre de lo general a lo particular. Se trata de un tipo de argumento común en las ciencias y la lógica formal, que sin embargo se encuentra limitado por la veracidad de sus premisas, que se toman como punto de partida.
Por ejemplo: si todos los seres humanos necesariamente mueren y Pedro es un ser humano, es seguro que Pedro morirá.
Argumentos abductivos
Los argumentos abductivos son aquellos que no parten de premisas certeras, sino que asumen dos premisas aisladas y obtienen de ellas una conclusión probable, aunque inverificable.
Por ejemplo: hoy es un lindio día es un día soleado, los días soleados paseamos con mi abuela; hoy iremos a pasear con mi abuela.
Argumentos causales
Los argumentos causales son aquellos que entienden la vinculación de las premisas y las consecuencias, de acuerdo a las leyes de causa y efecto. En ese sentido, establecen un vínculo que en apariencia luce necesario, pero que podría no serlo (casualidad versus causalidad).
Por ejemplo: cada vez que tomo el metro, me mareo. En el metro siempre hay aire acondicionado. Así que el aire acondicionado es el causante de mi mareo.
Argumentos por generalización
Los argumentos por generalización son aquellos que proponen extender una propiedad a un grupo de elementos, solamente por haberla observado en unos pocos integrantes del conjunto. En ese sentido, operan de manera similar a los inductivos.
Por ejemplo: Maríaes de Géminis y es irascible. Yenny es de Géminis y también irascible. Por lo tanto, todos los de Géminis son irascibles.
Estructura de un argumento
Todo argumento se compone de dos elementos básicos:
- Premisas. Son los puntos de partida del razonamiento lógico, que brindan los elementos iniciales a partir de los cuales poder dar con algo. Pueden ser de distinto número. Por ejemplo: “Todos los hombres son mortales” y “Pedro es un hombre”.
- Conclusiones. Es la segunda parte del razonamiento, que depende de la primera y que se obtiene a partir de algún tipo de procedimiento lógico, dando así fin al argumento. Por ejemplo: “entonces Pedro es mortal”.
Dichos elementos se organizan de la siguiente manera:
- Afirmación. La premisa inicial del argumento, eso que deseamos probar o justificar.
- Razonamiento. El porqué de la afirmación, o sea, el sustento lógico o formal que la sostiene.
- Evidencia. La evidencia que suministramos para comprobar o demostrar el razonamiento.
¿Qué es un contraargumento?
Un contraargumento u objeción es una réplica, es decir, un argumento que se ofrece para contradecir a otro, demostrando su invalidez o señalando los puntos débiles de su estructura lógica, y así defender la postura contraria. Es posible refutar un contraargumento con otro contraargumento, en una cadena de confrontaciones lógicas que suele darse en las discusiones o debates.
¿Cómo hacer un argumento?
Para formular un argumento, es necesario seguir los siguientes pasos:
- Elegir las premisas. El primer paso para cualquier argumentación implica la recopilación de información, puesto que es necesario saber de qué se habla y cuál es la propia postura al respecto. Una vez formuladas las premisas, se debe elegir aquella que servirá como afirmación, es decir, como premisa inicial para justificar o sustentar en adelante. Por ejemplo: “Volar en avión contamina más que viajar en automóvil”
- Encontrar el razonamiento más adecuado. Esto significa elegir entre los métodos posibles de justificación lógica para sustentar la afirmación, lo cual equivale a elegir un camino que conduzca a la meta deseada. Dependiendo de dicho camino, se debe elegir unas u otras evidencias. En ello también pueden influir, de haberlas, las premisas del contrincante. Para seguir el ejemplo anterior, un buen razonamiento sería aquel que acude a la explicación del funcionamiento de los motores de un avión y del tipo de combustible que emplea, para demostrar su química y cómo arroja mucho más carbono a la atmósfera.
- Acudir a la evidencia. Esto implica acudir a casos concretos, a argumentos de terceros, a criterios de autoridad y a cualquier tipo de proposiciones que sirvan para dar sustento a las premisas o a las afirmaciones iniciales. Para el ejemplo anterior, lo ideal sería contar con estadísticas, artículos científicos u otro tipo de evidencia que sustente lo dicho.
Ejemplos de argumentos
Los siguientes son ejemplos de argumentos:
- Premisa: “Buenos Aires es la ciudad con más librerías del mundo”.
Razonamiento: “Tomando en cuenta que solamente en un barrio pequeño de la ciudad como Recoleta podemos contar, con facilidad, más de diez librerías, ¿cuántas podremos hallar en un barrio grande como Palermo? ¿Cuántas habrá entonces en los 48 que componen la ciudad? No existe ninguna otra ciudad en la que haya un porcentaje semejante”.
- Premisa: “Las tormentas pueden causar migrañas”.
Razonamiento: “Según un artículo en la revista Nature de 2012, esa incidencia no es rara y tiene que ver con la presión atmosférica, que afecta más a los organismos genéticamente propensos a la migraña. Y en el artículo citaban además varias investigaciones en la Universidad de Oxford que lo respaldaba”.
Contraargumento
Un contraargumento u objeción es una réplica, o sea, a un argumento que se emplea para contradecir a otro, demostrando su invalidez o señalando los puntos débiles de su estructura, para afirmar justamente lo contrario. También es posible emplear un contraargumento para objetar a otro, en una cadena de confrontaciones lógicas que suele darse en las discusiones o debates.
Sigue con:
¿Te fue útil esta información?
Sí No¡Genial! Gracias por visitarnos :)