Te explicamos qué es el predicado de una oración, su núcleo, su estructura y los tipos que existen. Además, ejemplos de oraciones con sujeto y predicado.
¿Qué es el predicado?
El predicado es la parte de una oración en la que se indican las acciones, los estados y las características del sujeto.
Desde un punto de vista sintáctico, las oraciones bimembres se dividen en sujeto y predicado. El sujeto es la persona, el animal o el objeto sobre el que se predica y tiene un núcleo que es un sustantivo o un pronombre. En cambio, el predicado es la parte en la que se enuncia algo sobre el sujeto, como las acciones que lleva a cabo, las condiciones en las que está, las acciones que recibe de otros o sus propiedades. Su núcleo suele ser un verbo conjugado que concuerda en persona (primera, segunda o tercera) y número (singular o plural) con el núcleo del sujeto.
Por ejemplo, en la oración El gato juega, el sujeto es el gato y el predicado es juega. El núcleo del predicado (juega) concuerda en tercera persona del singular con el núcleo del sujeto (gato).
Existen diversas formas y tipos de predicado, y su núcleo, el verbo, puede recibir o no modificadores que añaden información contextual o circunstancial. Por ejemplo, en la oración Las plantas crecieron mucho, mucho es un complemento circunstancial de cantidad que indica cuánto crecieron las plantas.
- Ver también: Oración
Preguntas frecuentes
¿Qué es el predicado?
El predicado es la parte de una oración bimembre en la que se hace referencia a las acciones que realiza el sujeto o se brinda información sobre él.
¿Cómo es el predicado?
El predicado tiene un núcleo verbal que puede ser un verbo conjugado o una frase verbal, y que puede recibir o no modificadores.
¿Cómo se reconoce el predicado?
Para reconocer el predicado, se debe identificar su núcleo, es decir, el verbo que concuerda en persona y número con el núcleo del sujeto.
Para reconocer cuál es el predicado de una oración, se debe:
- Identificar el núcleo verbal. Es un verbo conjugado o una frase verbal que concuerda en persona y número con el núcleo sujeto. Por ejemplo, en la oración Los perros ladran en el balcón, el núcleo verbal es ladran.
- Identificar el sujeto. Se debe modificar el número del verbo para poder reconocer el sujeto. Por ejemplo, en la oración Los perros ladran en el balcón, si se cambia el número del verbo de plural a singular (ladra), el sujeto también se modifica (El perro ladra en el balcón). Por lo tanto, los perros es el sujeto de la oración.
- Identificar los complementos del verbo. Todo lo que no forma parte del sujeto y que modifica al núcleo verbal pertenece al predicado. Por ejemplo, en el balcón indica dónde se realiza la acción y complementa al núcleo verbal, por lo tanto, el predicado de la oración es ladran en el balcón.
Otra prueba consiste en preguntar qué es o qué hace el sujeto. Una vez identificado el sujeto (los perros), se puede preguntar ¿qué hacen los perros? y la respuesta (ladran en el balcón) indica cuál es el predicado.
Tipos de predicado
En las oraciones bimembres, los predicados pueden ser de dos tipos:
- Predicado verbal. Se trata del predicado que tiene un verbo predicativo, es decir, que tiene un significado porque detalla acciones o eventos que atañen al sujeto. Por ejemplo: Mi gato come sardinas.
- Predicado nominal. Se trata de un predicado que está formado por un verbo copulativo (ser, estar, parecer) y un atributo (una construcción que designa características del sujeto). En este caso, el verbo no tiene significado definido, sino que sirve para unir el sujeto con el atributo. Por ejemplo: Mi gato es gris.
Núcleo del predicado
Tanto el predicado como el sujeto poseen un núcleo, que es la palabra más importante de la construcción. En el caso del predicado, el núcleo es el verbo principal de la oración.
El núcleo del predicado puede ser:
- Un verbo conjugado. Varía según la persona, el número, el tiempo y el modo. Por ejemplo: Patricia alquiló un apartamento.
- Una frase verbal. Está formada por un verbo auxiliar y un verboide, es decir, un infinitivo, un participio o un gerundio. Por ejemplo: Andrés debe ir al supermercado.
Estructura del predicado
Generalmente, el predicado se compone de un sintagma verbal, es decir, una construcción que tiene un verbo como núcleo y que puede recibir distintos modificadores o complementos.
Los complementos verbales acompañan al verbo para precisar su significado e indicar las circunstancias y otros elementos que están relacionados con la acción. Estos complementos pueden ser:
- Complemento directo (u objeto directo). Refiere al objeto sobre el que recae la acción indicada por el verbo. Para identificarlo, se lo puede reemplazar por los pronombres lo, la, los o las. Por ejemplo: Mi gato atrapó la pelota (se lo puede reemplazar por la: Mi gato la atrapó).
- Complemento indirecto (u objeto indirecto). Refiere al receptor de la acción expresada por el verbo. Para identificarlo, se lo puede reemplazar por los pronombres le o les. Por ejemplo: Mi gato arrojó la pelota al perro (se lo puede reemplazar por le: Mi gato le arrojó la pelota).
- Complementos circunstanciales. Son construcciones que señalan alguna circunstancia temporal, espacial o de otro tipo. Los más usuales son el complemento circunstancial de tiempo (responde a la pregunta ¿cuándo?), de lugar (responde a la pregunta ¿dónde?), de modo (responde a la pregunta ¿cómo?), de causa (responde a la pregunta ¿por qué?), de finalidad (responde a la pregunta ¿para qué?). Por ejemplo: Mi gato come en la cocina. (Lugar) / Mi gato comió ayer. (Tiempo)
- Complemento agente. Aparece únicamente en las oraciones de voz pasiva y menciona a la persona que realiza la acción. Se forma con la preposición por y un término. Por ejemplo: El techo fue arreglado por el albañil.
- Complemento de régimen. Es una construcción encabezada por una preposición que es necesaria en la oración para que el verbo tenga sentido. Aparece con verbos específicos, tales como atreverse a, acordarse de y burlarse de. Por ejemplo: Nunca dudé de ti.
- Atributo. Es una construcción que complementa a un verbo copulativo (ser, estar, parecer) y que expresa cualidades, capacidades o rasgos del sujeto. Por ejemplo: Mi suéter es rojo.
- Predicativos. Indican las cualidades o los rasgos del sujeto (subjetivo) o del complemento directo (objetivo), y aparecen con verbos predicativos. Por ejemplo: Ana llegó cansada a su casa. / Encontró la nevera abierta.
Oraciones con sujeto y predicado
Las oraciones que tienen sujeto y predicado son denominadas bimembres (es decir, que tienen dos miembros o partes). Algunos ejemplos de oraciones bimembres son:
- El escritor firmó los libros en la biblioteca.
- Sujeto: el escritor
- Núcleo del sujeto: escritor
- Predicado: firmó los libros en la biblioteca
- Núcleo del predicado: firmó
- Complemento directo: los libros
- Complemento circunstancial de lugar: en la biblioteca
- Sabrina compró regalos a su familia.
- Sujeto: Sabrina
- Núcleo del sujeto: Sabrina
- Predicado: compró regalos a su familia
- Núcleo del predicado: compró
- Complemento directo: regalos
- Complemento indirecto: a su familia
- La actriz leyó el guion de la película ayer.
- Sujeto: la actriz
- Núcleo del sujeto: actriz
- Predicado: leyó el guion de la película ayer
- Núcleo del predicado: leyó
- Complemento directo: el guion de la película
- Complemento circunstancial de tiempo: ayer
- Nadia llegó primera a la meta de la maratón.
- Sujeto: Nadia
- Núcleo del sujeto: Nadia
- Predicado: llegó primera a la meta de la maratón
- Núcleo del predicado: llegó
- Predicativo subjetivo: primera
- Complemento circunstancial de lugar: a la meta de la maratón
- Los artistas fueron ovacionados por el público.
- Sujeto: Los artistas
- Núcleo del sujeto: artistas
- Predicado: fueron ovacionados por el público
- Núcleo del predicado: fueron ovacionados (frase verbal pasiva)
- Complemento agente: por el público
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Referencias
- AA.VV. (2003). Gramática de la Lengua española. Reglas y ejercicios. Larousse.
- Gómez Torrego, L. (2003). Análisis sintáctico. Teoría y práctica. Ediciones SM.
- Gómez Torrego, L. (2005). Gramática didáctica del español. Ediciones SM.
- Real Academia Española. (2019). Glosario de términos gramaticales. Ediciones Universidad de Salamanca.
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