Te explicamos qué es la resistencia aeróbica, qué ejercicios pueden fortalecerla y en qué se distingue de la resistencia anaeróbica.
¿Qué es la resistencia aeróbica?
La resistencia aeróbica es una de las dos formas de resistencia del cuerpo humano, es decir, uno de sus modos de realizar continuamente una actividad o un trabajo durante el mayor tiempo posible.
En el caso de la resistencia aeróbica, esta capacidad se refiere específicamente a la respiración y el balance de oxígeno en el cuerpo humano, así como de los distintos ritmos de esfuerzo que es capaz de sostener.
El cuerpo consume oxígeno del aire para iniciar sus procesos de ruptura de la molécula de glucosa, que es como obtiene la energía química para mantenerse vivo y desempeñar sus diversas actividades diarias.
Cuando el cuerpo se somete a un esfuerzo, se consume dicha energía (almacenada bajo la forma de moléculas de ATP) para mantener los músculos operando, o sea, elongándose y estrechándose, y el resto del cuerpo oxigenado.
Si la capacidad de distribución en el cuerpo de la sangre oxigenada falla (por problemas en el sistema cardíaco), o pasa lo mismo con la capacidad de oxigenarla en primer lugar (por problemas en el sistema respiratorio), entonces habrá menos energía disponible para el organismo y se producirá la fatiga, obligándolo a detener el esfuerzo.
Así, en la medida en que la resistencia aeróbica sea mayor, se podrá retrasar la llegada del cansancio y soportar mayores períodos de esfuerzo antes de quedarse sin oxígeno.
Para incrementar o sostener la resistencia aeróbica, se deben realizar con regularidad y constancia ejercicios que involucren el sistema cardiorespiratorio, también conocidos como ejercicios aeróbicos (del latín: aero, “aire”; y bio, “vida”). Estos ejercicios se caracterizan por presentar una baja intensidad, pero un largo período de tiempo.
- Ver además: Gimnasia
Ejemplos de ejercicios de resistencia aeróbica
Algunos ejemplos de ejercicios que fomentan la resistencia aeróbica son:
- Aerobics. Consisten en sesiones de movimientos rítmicos, a menudo acompañados de música, que mantienen el cuerpo en constante movimiento y el corazón latiendo a un ritmo elevado pero regular.
- Caminar. El más simple de todos los ejercicios aeróbicos, no implica pasear con un ritmo detenido, sino caminar sostenidamente y a buen paso durante al menos media hora. Se puede combinar con la recreación, los paseos y las excursiones, incluso dentro de la ciudad.
- Trotar. Implica un mayor ritmo cardíaco y por lo tanto es mucho más demandante que una caminata. Pero, si no se ejecuta bien, puede producir daños en las rodillas y las articulaciones inferiores.
- Bicicletear. Puede hacerse en una bicicleta real, pedaleando hacia algún destino, o en una bicicleta fija o estacionaria, como las que se pueden hallar en los gimnasios.
- Saltar la cuerda. Es un gran ejercicio aeróbico ya que mantiene el cuerpo en constante suspensión, empujando con los pies sucesivamente contra el suelo. Esto exige al corazón y a los pulmones un esfuerzo sostenido que, además, utiliza tanto los músculos inferiores como superiores.
- Natación. Al hallarse sumergido, el cuerpo humano debe sostener la respiración durante segundos y luego renovar el aire de los pulmones durante los instantes en que la cabeza está afuera, programando así al organismo para usar el oxígeno al máximo y mejorar su capacidad pulmonar.
¿Qué es la resistencia anaeróbica?
La resistencia anaeróbica es aquella que no involucra el consumo de oxígeno y tampoco la respiración, sino los esfuerzos físicos de gran intensidad en cortos períodos de tiempo, durante los cuales el oxígeno se consume de manera rápida y no hay tiempo de mantener el consumo energético que el esfuerzo demanda.
Existen dos tipos de resistencia anaeróbica:
- Resistencia anaeróbica aláctica. Involucra esfuerzos muy breves y muy intensos (de 0 a 16 segundos), en los que la presencia de oxígeno es casi nula. Sin embargo, el empleo del ATP no subproduce sustancias de desecho.
- Resistencia anaeróbica láctica. Al involucrar esfuerzos poco intensos pero de mediana duración (de 15 segundos a 2 minutos), la ausencia de oxígeno debe compensarse con algún proceso de obtención de energía, que en este caso es a través de la fermentación láctica (de allí su nombre). El inconveniente de dicho proceso energético de emergencia es que subproduce ácido láctico, que al acumularse en las articulaciones o la musculatura causa la llegada muy rápida de la fatiga.
- Más en: Resistencia anaeróbica
Diferencias entre resistencia aeróbica y anaeróbica
Las diferencias entre la resistencia aeróbica y la resistencia anaeróbica se pueden resumir de la siguiente manera:
Resistencia aeróbica | Resistencia anaeróbica |
---|---|
Depende del sistema cardiovascular y de la respiración, ya que involucra la capacidad de oxigenación del cuerpo. | No depende del oxígeno ni del sistema cardiovascular, sino de procesos secundarios de obtención de energía, como la fermentación láctica. |
Se fortalece a partir de ejercicios regulares de baja intensidad y largos períodos. | Se fortalece a partir de ejercicios de gran intensidad y períodos cortos. |
Su ejercitación incrementa la resistencia y la condición física. | Su ejercitación incrementa la fuerza y la potencia corporal. |
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Referencias
- Bernal Ruiz, J. (2006). La resistencia y el sistema cardiorrespiratorio en la educación física y el deporte. Wanceulen S. L.
- Meléndez, A. (1995). Entrenamiento de la Resistencia Aeróbica: Principios y Aplicaciones. Alianza Editorial.
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