Te explicamos quiénes eran los criollos en la América colonial, sus costumbres y su relación con los mestizos. Además, el origen del término.
¿Quiénes eran los criollos?
El término “criollo” se refiere a una persona de origen europeo, principalmente español, nacida en América durante la época colonial. En ese entonces, la sociedad estaba dividida en clases sociales y raciales, que les asignaban a los individuos un lugar y una jerarquía dependiendo de sus orígenes étnicos.
Los blancos criollos formaban parte de la casta privilegiada de la colonia, pero lo eran en una categoría inferior a la de los europeos. Las leyes del siglo XVIII les impedían el acceso a la conducción política (los cargos públicos) o eclesiástica (los cargos religiosos) de la sociedad colonial. Además, en virreinatos como el de Nueva España, se les impedía a las mujeres blancas criollas casarse con funcionarios peninsulares.
Estas medidas tenían como objetivo limitar el poder de los criollos, que eran propietarios de gran parte de las tierras y controlaban la mayor parte del comercio. Su poder económico y su prestigio social constituían una amenaza para el control colonial de España.
Los intentos europeos por limitar el poder de los criollos tuvo como efecto la consolidación de una identidad criolla propia, distinta de la europea peninsular. Este fue un elemento clave de las revoluciones que en el siglo XIX llevaron a las guerras de independencia hispanoamericanas.
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Puntos clave
- El término “criollo” refiere a las personas de origen europeo, especialmente español, que nacieron en América durante la época colonial.
- Los criollos eran una casta social privilegiada de terratenientes que tenían un gran poder económico, pero estaban excluidos de los cargos políticos más altos (reservados para los peninsulares, nacidos en Europa).
- Los criollos tenían el mismo estatus legal que los mestizos, pero gozaban de mayor prestigio y acceso a recursos, mientras que los mestizos enfrentaban discriminación y limitaciones económicas.
- La exclusión política y las tensiones con los peninsulares fueron factores clave en las revoluciones de independencia hispanoamericanas en el siglo XIX.
Características de los criollos
Entre las principales características de los criollos en la América colonial, se encuentran:
- Origen europeo. Eran descendientes de europeos, principalmente de españoles, pero nacidos en América.
- Posición económica. Muchos de ellos eran propietarios de grandes tierras, haciendas y minas, por lo que constituían una clase económicamente poderosa.
- Exclusión política. A pesar de su riqueza, estaban marginados del poder político más alto. Los cargos de mayor relevancia eran ocupados por los peninsulares (aquellos nacidos en España).
- Educación y cultura. Accedían a una mejor educación que otros grupos de la sociedad y en muchas ocasiones eran enviados a formarse en Europa, de donde tomaron los ideales de la Ilustración.
- Resentimiento hacia los peninsulares. El hecho de ser excluidos de los cargos políticos, a pesar de su riqueza y poder local, alimentó tensiones con los peninsulares.
- Promotores de la independencia. Jugaron un papel protagónico en los movimientos independentistas del siglo XIX.
Origen del término “criollo”
El término “criollo” proviene del vocablo crioulo del portugués, y a su vez del verbo “criar”. De esto se desprende que los criollos son, en principio, aquellos individuos que se crían en un determinado territorio. Este uso de la palabra sobrevive hasta nuestros días, en los que se habla de “costumbres criollas”, la “cocina criolla” e incluso la “raza criolla de caballos”, la única nativa americana.
El vocablo “criollo” hoy se emplea en buena parte de la América hispana como sinónimo de “local”, es decir, como representativo de la cultura particular de la región, sin hacer mayores distinciones raciales o étnicas al respecto. De hecho, se llama “criollismo” al movimiento cultural nacionalista de valoración y visibilización de lo latinoamericano.
Costumbres de los criollos
Los criollos americanos en la época colonial se clasificaban a sí mismos como blancos. De esta manera, se diferenciaban de los aborígenes (“indios”, en la jerga colonial) y de los descendientes de africanos (“negros”), así como de la extensa clasificación de castas mestizas, fruto de la unión entre personas de diferente origen étnico.
Las costumbres y la cultura de los criollos eran, en muchos aspectos, una reelaboración local de las peninsulares. Solían reunirse con sus pares en fiestas, tertulias y celebraciones. Practicaban la fe católica y mantenían sus valores morales.
En muchos casos, los criollos eran educados en Europa. Algunos eran enviados a Francia. Allí incorporaron la cultura de la Ilustración y sus valores republicanos que, con el tiempo, se convirtieron en ideales fundamentales de las revoluciones de independencia.
Las vestimentas criollas variaban según la región, pero tendían a la ostentosidad y el decoro, dado que eran la élite local de sus sociedades. Para los vestidos de las damas de sociedad, por ejemplo, se usaban telas importadas de Europa y la mano de obra textil de las esclavas o siervas de la familia.
Los criollos eran poseedores de tierras y, por lo tanto, también de esclavos. En general, sus costumbres gastronómicas diferían de las peninsulares, al adaptarse a los alimentos de cultivo en suelo americano.
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Diferencias entre criollos y mestizos
Mientras los criollos eran los hijos de europeos blancos nacidos en América, los mestizos eran descendientes de las distintas etnias de la sociedad colonial: blanca, negra e india. Legalmente, los mestizos eran ciudadanos españoles y su estatus jurídico no difería del de los blancos criollos. Por lo tanto, podían poseer propiedades y ejercer libremente el comercio.
Sin embargo, el rol de los mestizos en la sociedad era muy distinto al de los criollos. Aunque legalmente compartían los mismos derechos, en la práctica, los mestizos enfrentaban una discriminación social considerable. Mientras los criollos ocupaban posiciones de poder político y económico, los mestizos solían ser relegados a empleos de menor prestigio y sus posibilidades económicas se veían limitadas.
Ver además: Mestizaje
Lenguas criollas
Cuando se habla de lenguas criollas, se hace referencia a un conjunto de lenguas o dialectos mestizos, fruto de la hibridación entre lenguas europeas (como el español, el francés o el inglés) y lenguas africanas o indígenas originarias.
El fruto de esta mezcla lingüística se conoce a menudo como “criollo” o creole, y es frecuente en las regiones de abundante migración africana durante la época colonial. Algunos ejemplos de lenguas criollas aún existentes son el criollo panameño, el inglés criollo nicaragüense, el patois o criollo jamaiquino, el bichelamar, el ndyuka, el criollo francés de Luisiana o el mekatelyu costarricense.
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Referencias
- Ackermann, M. (2008). Latin America, Bourbon reforms in; Latin America, independence in. Encyclopedia of World History, vol. IV: Age of Revolution and Empire. 1750 to 1900. Facts on File.
- Francis, J. y Leonard, T. (Eds.). (2006). Creole. Encyclopedia of Latin America, vol I: Amerindians through Foreign Colonization (Prehistory to 1560). Facts on File.
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