Sutil

Te explicamos qué es algo sutil, sus diversos sentidos y el origen del término. Además, las características de una persona sutil.

¿Qué es algo sutil?

Cuando decimos que algo o alguien es sutil, o que actúa con sutileza, nos estamos refiriendo a que es cuidadoso, leve, delicado o incluso difícil de percibir, es decir, todo lo contrario a la torpeza, la obviedad, la tosquedad o la violencia.

Estas palabras provienen del término en latín subtilis, traducible como “fino”, “delicado” o incluso, figuradamente, “ingenioso”. Dicha palabra está formada por el prefijo sub-, que sobrevive hasta nuestros días y significa “por debajo”, y el sustantivo tela, de modo lo sutil originalmente se refería al hilo más delgado de la tela, que va por debajo de la urdimbre y por lo tanto queda oculto detrás de los demás.

Así, la palabra sutil se empleó no sólo para aquello frágil, cuidadoso y liviano (“una caricia sutil” o “la sutil luz de la tarde”), sino también y figuradamente para aquello que actúa con precisión y discreción, o sea, sin que se note de buenas a primeras (“una sutil emboscada” o “una sutil acusación”).

Hay que explicar que la sutileza es considerada tradicionalmente como algo positivo, próximo a la discreción y a la gracia, y por lo tanto asociado a la exquisitez, la calidad y la buena factura. Por ello, son sinónimos de sutileza los términos: delicadeza, finura, cuidado, levedad, ingenio y agudeza.

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¿Cómo es una persona sutil?

Cuando decimos que una persona es sutil o actúa de modo sutil, queremos decir que actúa y opina con cuidado, de manera casi imperceptible. Eso aplica para las cosas que hace y también para las cosas que dice. Así, podemos decir que una persona es sutil, por ejemplo, si en lugar de acusar, insinúa; en lugar de ir al grano, habla con delicadeza; y si en lugar de confrontar, teje estrategias.

La sutileza de alguien puede apreciarse muy claramente a la hora de dar una mala noticia: habrá quienes prefieran la frontalidad, e incluso la tosquedad, mientras que una persona sutil irá poco a poco y de la forma más cuidadosa posible. Esto a menudo se interpreta como señal de agudeza, consideración o incluso inteligencia, ya que una persona sutil generalmente está al tanto del daño que un mal comentario puede causar.

Sin embargo, esto no es sinónimo de bondad, ni mucho menos. Se pueden hacer cosas muy malas también con sutileza. Una persona puede engañar o manipular a otra con comentarios sutiles, delicados, casi inocentes; puede planificar una estrategia en contra de otro de una manera sutil, o sea, calculada, ingeniosa e imperceptible; con ello únicamente nos referimos al modo en que lo haría.

En resumen, una persona sutil es aquella que no actúa con brutalidad, tosquedad o frontalidad, sino con cautela y delicadeza, lo cual perfectamente puede ser una señal de su agudeza y su ingenio.

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Referencias

• “Sutil” en el Diccionario de la lengua de la Real Academia Española.
• “Sutileza” en el Diccionario de la lengua de la Real Academia Española.
• “Etimología de Sutil” en Etimologías de Chile.net.
• “Elogio de la sutileza” por Antonio Heredia Bayona en Diario de Sevilla (España).