Hembrismo

Te explicamos qué es el hembrismo, sus diferencias con el feminismo y su relación con el machismo. Además, el debate que suscita.

¿Qué es el hembrismo?

Por hembrismo se entiende la discriminación sexual hacia los varones, por parte de las mujeres. Es un neologismo que se propone como el concepto inverso y opuesto del machismo, y cuya existencia o siquiera posibilidad real es debatida en la actualidad.

No debe en ningún caso confundirse con el feminismo, que es una escuela crítica de pensamiento que persigue la igualdad entre hombres y mujeres, desmontando el pensamiento patriarcal.

El uso de este término se ha hecho popular en muchas discusiones contemporáneas de la igualdad de géneros y de los reclamos feministas, especialmente intensos y visibilizados durante la segunda década del siglo XXI. Se ha propuesto como un correlato radical del machismo, es decir, una forma de pensamiento excluyente ejercido por las mujeres hacia los varones.

Se entiende como respuesta o represalia por el machismo tradicional de la mayoría de las culturas humanas. Sin embargo, no todas las instituciones de la lengua y la cultura han admitido su uso, ni lo han incorporado a discursos formales u oficiales.

Por citar dos casos, en el Diccionario de la Real Academia Española no aparece mencionado, pero el catedrático Manuel Alvar Ezquerra, de la Universidad Complutense de Madrid, define el hembrismo como la “discriminación sexual, de carácter dominante, adoptada por mujeres”.

Sin embargo, el término hembrismo fue empleado en la década del 1960 por el sociólogo francés Pierre Bourdieu, en su libro La dominación masculina. Paradójicamente, el teórico lo empleaba para referirse a la actitud excesivamente servil que la cultura machista tradicional asigna e impone a la mujer.

Es decir que para Bourdieu, consistía en un concepto complementario del machismo: si este último es la dominación masculina de la sociedad, el hembrismo sería la sumisión femenina en la misma. Visto así, el machismo produciría el hembrismo.

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Debate sobre el hembrismo

Las autoridades de la crítica feminista alegan que el hembrismo no existe, sino que es un neologismo creado por ciertos sectores conservadores que, negados a ceder sus privilegios machistas. Es decir que se emplea para desprestigiar la lucha reivindicativa del feminismo, queriendo venderlo como un supuesto odio al género masculino todo.

Sin embargo, en otros casos se emplea el término para referirse a la existencia de un feminismo radical, como una forma de separarlo de corrientes menos violentas, más reformistas, si se quiere.

El resurgimiento del feminismo a principios del siglo XXI ha generado en algunas colectividades la idea de que la masculinidad se encuentra bajo ataque y de que el feminismo perseguiría una agenda para castrar simbólicamente a los varones. El uso del término hembrista como “feminista radical” pareciera surgir de dichos sectores.

Por ejemplo, es empleado con frecuencia en los movimientos neocon (neoconservadores) o de alt-right o derecha alternativa, quienes acusan a la sociedad de padecer una agenda de “marxismo cultural” que amenazaría los valores tradicionales occidentales. Una de las voces más afamadas de este tipo de colectividades es el psicólogo canadiense Jordan Peterson.

Para la mayoría de los académicos tradicionales, en cambio, este tipo de reclamos no se sustentan sino en la defensa de los privilegios de la clase conservadora y no deben ser tomados en serio. El debate, del modo que sea, se encuentra vigente.

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Referencias

• “Hembrismo” en Wikipedia.
• “El feminismo no es hembrismo” por Mariano Marquevich en Perfil (Argentina).
• “El éxito del psicólogo canadiense que dice que se culpa a los hombres sólo por serlo” en La Vanguardia (España).
• “Feminismo no es lo contrario de machismo” en Fundéu BBVA.