Habilidad

Te explicamos qué es la habilidad y ejemplos de habilidades que puede tener una persona. Además, los tipos de habilidades que existen.

Habilidad
La habilidad es la capacidad para desempeñar de manera correcta una tarea determinada.

¿Qué es una habilidad?

Una habilidad es la capacidad de un individuo para desempeñar correctamente, con gracia y facilidad, una tarea determinada. Se trata de una forma de aptitud específica que se demuestra en una actividad puntual, que puede ser de tipo físico, mental, emocional o social. Por ejemplo, correr rápidamente, resolver un problema matemático, actuar con empatía o trabajar en equipo.

Se llama hábiles a las personas que poseen facilidad para desempeñarse en un área particular. Aunque suelen ser vistas como un talento innato natural, las habilidades pueden desarrollarse o perfeccionarse mediante la práctica o la experiencia. Por ejemplo, una persona puede nacer con aptitudes naturales que facilitan el desarrollo de habilidades deportivas.

En un sentido amplio, el término habilidad puede emplearse como sinónimo de talento, capacidad o destreza, aunque estos tienen matices diferentes. Lo contrario a la habilidad es la torpeza, la incompetencia o la inhabilidad.

Origen de la palabra habilidad: La palabra habilidad proviene del latín habilis, que inicialmente significó “aquello que se puede tener”. Este término fue empleado en la designación de la especie Homo habilis, el “hombre hábil”, que aprendió a emplear herramientas de piedra para facilitar tus tareas cotidianas.

Tipos de habilidades

Habilidad
Las habilidades cognitivas involucran procesos mentales.

Es posible clasificar las habilidades en dos categorías principales: generales y específicas. Las habilidades generales o básicas son aquellas que se pueden aplicar a un rango amplio de tareas, mientras que las habilidades específicas se refieren a tareas concretas. Por ejemplo, tocar diversos instrumentos es una habilidad general, mientras que tocar la flauta barroca con destreza es una habilidad específica.

Además, las habilidades pueden clasificarse en duras y blandas. Las habilidades duras son competencias técnicas y específicas, como el manejo de herramientas o los idiomas. En cambio, las habilidades blandas se refieren a las aptitudes interpersonales y emocionales, como la comunicación efectiva o la empatía.

Otra forma de clasificar las habilidades es según el área en la que se aplican. Así se distinguen: habilidades cognitivas, habilidades sociales, habilidades físicas y habilidades emocionales.

Habilidades cognitivas

Las habilidades cognitivas son aquellas que involucran procesos mentales, como la memoria, la rapidez del pensamiento, la deducción lógica y otras capacidades vinculadas con el saber, el aprendizaje y el conocimiento. Estas habilidades, a su vez, pueden ser:

  • Habilidades verbales. Se refieren al manejo del lenguaje y la palabra. Por ejemplo, comprensión de texto, expresión oral, vocabulario, narración de historias.
  • Habilidades visoespaciales. Se refieren al manejo del espacio y los volúmenes en abstracto. Por ejemplo, interpretación de mapas, orientación en el espacio, reconocimiento de formas, resolución de rompecabezas.
  • Habilidades matemáticas. Se refieren al manejo de los números y del cálculo en sus distintas formas. Por ejemplo, cálculos mentales, operaciones con variables, estimación de cantidades, solución de ecuaciones.
  • Habilidades lógicas. Se refieren al manejo de la lógica y la deducción, es decir, a la obtención de conclusiones válidas a partir de premisas dadas. Por ejemplo, resolución de acertijos, análisis de causas y efectos, creación de hipótesis, identificación de patrones en secuencias.
  • Habilidades metacognitivas. Se refieren al manejo de las propias ideas y de la forma misma de pensar. Por ejemplo, reconocimiento de los errores, utilización de técnicas de estudio efectivas, establecimiento de metas personales, evaluación del propio proceso de pensamiento.

Habilidades sociales

Las habilidades sociales son aquellas que permiten a las personas  interactuar de forma positiva con los demás y responder de manera adecuada a las demandas del entorno. Son necesarias para desenvolverse en todos los ámbitos de la vida. Por ejemplo:

  • Comunicación efectiva
  • Asertividad
  • Persuasión
  • Negociación
  • Resolución de conflictos
  • Trabajo en equipo

Habilidades físicas

Las habilidades físicas son aquellas que permiten un manejo coordinado del cuerpo e involucran capacidades motoras. Son fundamentales para el desempeño deportivo y para el bienestar general. Por ejemplo:

  • Resistencia
  • Fuerza
  • Equilibrio
  • Agilidad
  • Flexibilidad
  • Potencia

Habilidades emocionales

Las habilidades emocionales son aquellas que le permiten a una persona reconocer, comprender, regular y expresar sus emociones de manera efectiva. Son esenciales para manejar las respuestas emocionales en diversas situaciones e identificar los factores que producen tensión. Por ejemplo:

  • Autorregulación
  • Motivación
  • Manejo del estrés
  • Tolerancia a la frustración
  • Resiliencia

Ejemplos de habilidades de una persona

Según la Organización Mundial de la Salud, el desarrollo humano se relaciona con la aparición y el dominio de un número determinado de habilidades. Por ejemplo:

  • Autoconocimiento. Es la capacidad de comprenderse a uno mismo, reconociendo pensamientos, emociones y comportamientos.
  • Empatía. Es la capacidad de percibir, entender y compartir los sentimientos ajenos, poniéndose en el lugar de la otra persona.
  • Comunicación asertiva. Es la capacidad de transmitir información a los demás de manera honesta, eficaz y precisa.
  • Toma de decisiones. Es la capacidad para evaluar opciones y elegir la mejor posible.
  • Pensamiento creativo. Es la capacidad de hallar soluciones innovadoras a los problemas y de expresar ideas o conceptos mediante símbolos, signos y formas originales.
  • Pensamiento crítico. Es la capacidad de analizar situaciones, percibir los problemas subyacentes y evaluarlos para comprender sus implicaciones, sus consecuencias, sus causas.
  • Trabajo en equipo. Es la capacidad de colaborar con otras personas de forma organizada para lograr metas comunes.
  • Paciencia. Es la capacidad de tolerar situaciones difíciles y esperar con calma.
  • Flexibilidad. Es la capacidad de adaptarse a los cambios o a situaciones inesperadas.
  • Respeto. Es la capacidad de reconocer, valorar y mostrar consideración hacia otras personas, instituciones o ideas.
  • Honestidad. Es la capacidad de actuar con sinceridad, es decir, no mentir ni engañar a los demás ni a uno mismo.
  • Motivación. Es la capacidad de dirigir y sostener una conducta para alcanzar objetivos personales o grupales.
  • Resiliencia. Es la capacidad de recuperarse de situaciones adversas o difíciles, manteniendo el equilibrio o incluso sacando provecho de ellas.
  • Compromiso. Es la capacidad de asumir la responsabilidad de cumplir con las obligaciones o los propósitos personales.
  • Cooperación. Es la capacidad de trabajar con otras personas, realizando una tarea específica que sume al objetivo común.
  • Perseverancia. Es la capacidad de seguir adelante en un proyecto a pesar de los obstáculos.
  • Autonomía. Es la capacidad de tomar decisiones de forma independiente.
  • Manejo de emociones. Es la capacidad de identificar, comprender y regular las propias emociones.
  • Escucha activa. Es la capacidad de prestar atención plena a lo que otra persona dice y responder de manera adecuada.
  • Organización. Es la capacidad de ordenar y planificar tareas o recursos de manera eficiente.

Diferencias entre habilidad y destreza

La destreza normalmente está vinculada a las actividades físicas y manuales.

Comúnmente, los términos habilidad y destreza se utilizan como sinónimos, es decir, como maneras de nombrar la capacidad de una persona de llevar a cabo una tarea correctamente. Sin embargo, existen matices importantes entre estos conceptos.

La destreza (del latín dextra, “derecha”) es una forma de habilidad generalmente vinculada con el cuerpo y con los oficios manuales. En este sentido, es un término más restringido, ya que la habilidad puede abarcar tareas no solo físicas, sino también mentales, emocionales o sociales. Así,la destreza puede considerarse un tipo específico de habilidad.

A las personas que demuestran destreza en alguna actividad, se les denomina diestras (un deportista diestro, por ejemplo).

Aclaración: El término diestro también puede hacer referencia a que alguien utiliza su mano o pie derechos con preferencia, es decir, que es “derecho”, en contraposición a los zurdos, quienes prefieren utilizar sus extremidades izquierdas o siniestras.

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Referencias

  • Anders, V. et al. (2024). Etimología de habilidad. Etimologías de Chile. https://etimologias.dechile.net/
  • Gatti, B. A. (2005). Habilidades cognitivas y competencias sociales. Enunciación, 10(1), 123-132. https://revistas.udistrital.edu.co/
  • Morales Rodríguez, M., Benítez Hernández, M. y Agustín Santos, D. (2013). Habilidades para la vida (cognitivas y sociales) en adolescentes de zona rural. Revista Electrónica de Investigación Educativa, 15(3), 98-113. http://redie.uabc.mx/
  • Real Academia Española. (2024). Habilidad. Diccionario de la lengua española. https://dle.rae.es/
  • Unicef. (2017). Habilidades para la vida. Herramientas para el buen trato y la prevención de la violencia. https://www.unicef.org/

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Gómez, María Inés (22 de noviembre de 2024). Habilidad. Enciclopedia Concepto. Recuperado el 22 de noviembre de 2024 de https://concepto.de/habilidad-2/.

Sobre el autor

Última edición: 22 de noviembre de 2024
Revisado por María Inés Gómez
Psicopedagoga (IES Alicia Moreau de Justo). Arteterapeuta (SEUBE-UBA y UCAECE).

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